El PSOE y Compromís se han visto hoy las caras para tantear otro posible acuerdo de gobierno para los próximos cuatro años. Se trata del primer pulso que realizarán las dos fuerzas para decidir si la Alcaldía va a estar dirigida solo por los socialistas, como los de Carlos González pretenden, o, por el contrario, volverá a haber gobierno en coalición como los de Mireia Mollà quieren y como ya han trasladado a las altas esferas en València durante la negociación del Botànic.

La sede de los socialistas se ha abierto para celebrar ese encuentro que han finiquitado en menos de una hora sin que se haya llegado todavía a ningún acuerdo. La cita ha servido para acercar posturas pero de manera general y sin concretar nada. Ambas fuerzas han quedado en concretar una segunda reunión para profundizar en las condiciones de un futuro pacto. Un gobierno en coalición es lo que han puesto sobre la mesa los de Mollà hoy, quienes vienen repitiendo el mismo mensaje durante toda la campaña. "Creemos en un gobierno progresista, estable y que pueda desarrollar proyectos para los que durante estos cuatro años hemos puesto las semillas", ha señalado Esther Díez, portavoz de Compromís.

Su homólogo en el PSOE, Ramón Abad, ha dicho que ha habido un diálogo abierto y sincero y que no hay líneas rojas. También ha valorado la lealtad que ambos socios han tenido en este mandato, pero ha señalado que la decisión sobre si gobernarán en coalición con Compromís o con cualquier otra formación, o por el contrario, en solitario, como aspiran, la tomará la ejecutiva, dirigida por Alejandro Soler, en coordinación con el candidato, Carlos González.