Riegos de Levante afronta los próximos meses con tranquilidad, teniendo en cuenta el nivel de agua almacenada en el pantano de Crevillent, que tiene unos 10 hectómetros cúbicos, y que, hasta la fecha, este año no han dejado de llegar aportes del trasvase Tajo-Segura, que acaba de cumplir 40 años. No obstante, los regantes del sur de la provincia de Alicante han trasladado a la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) que contemple la posibilidad de permitirles reservar el agua que tienen concedida en la desaladora de Torrevieja hasta finales de año, y no solo hasta el 31 de septiembre, cuando finaliza el año hidrológico, y, con él, la concesión de los aportes.

El presidente de Riegos de Levante, Javier Berenguer, explicó que «pese a que el agua desalada nos sale muy cara, pensamos que es un recurso necesario para mezclarla con otros y poder hacer uso de ella en caso de necesidad, si nos falta el agua de mejor calidad».

La comunidad general de Riegos de Levante, que aglutina a más de 22.000 regantes, en su mayoría del Camp d'Elx, tiene una concesión del 16 hectómetros cúbicos de agua procedente de la desaladora de Torrevieja, de los que normalmente suelen utilizar menos, siempre y cuando sigan llegando recursos del Tajo-Segura. Hasta esta fecha los regantes han solicitado 4,2 hectómetros cúbicos de agua de Torrevieja este año, por lo que consideran que no harán uso de toda la concesión de aquí al 31 de septiembre, gracias a la racionalización de los aportes de mejor calidad que están llegando desde el Tajo-Segura. Es por este motivo, por el que proponen que el caudal restante, el que no se pida, pueda estar disponible hasta el 31 de diciembre, y así afrontar el inicio de las campaña del próximo año hidrológico con mayor tranquilidad.

Desde la comunidad general de Riegos de Levante apuntaron que «si la Confederación Hidrográfica del Segura acepta esta propuesta, que ya se ha comentado informalmente, podremos afrontar el inicio del próximo año hidrológico con una mejor planificación».

Formalismo

La petición formal la va a realizar el Sindicato de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats) a la Confederación Hidrográfica del Segura, que será la que tendrá que decidir si acepta, o no, la propuesta que lanzan los regantes para tener disponible una cantidad importante de agua, que luego podrían mezclar con otros recursos, como es el agua del trasvase o de las depuradoras, y poder destinarlas al cultivo.

En este sentido, Javier Berenguer recordó que «el coste del agua desalada, a 0,62 céntimos es muy elevado, pero no deja de ser una opción para compatibilizar su uso con otros recursos, aunque no resulte útil si solo disponemos de él y encima tenemos que hacer frente al tasazo, por lo que vamos a seguir reivindicando la continuidad del Tajo-Segura, que es fundamental para el regadío y para mantener el abastecimiento de agua de los hogares de la provincia de Alicante, donde también llega agua del trasvase».

La tramitación de la desalobradora llega al Ayuntamiento de Crevillent

Para tratar de ser menos dependiente de los aportes de aguas procedentes del trasvase Tajo-Segura, y de otras fuentes alternativas, como las desaladoras o las depuradoras, la comunidad general de Riegos de Levante está tramitando la creación de una planta desaladora de agua salobre, con la que se estima que se podrá obtener el 50% de los recursos hídricos que se consumen en el Camp d'Elx cada año.

Este proyecto, según explicó ayer la gerente de Riegos de Levante, Belén Castellano, «es complejo y requiere de mucho trabajo, y en ello estamos desde que se adjudicó a una empresa, que en estos momentos está trabajando, codo con codo, con el Ayuntamiento de Crevillent, para obtener todos los permisos».

La tramitación de esta planta se está llevando a cabo con el Ayuntamiento de Crevillent dado que la instalación se ubicará en terrenos de los regantes ubicados en esta localidad. De esta forma, es el Ayuntamiento de Crevillent el que tiene que revistar parte del proyecto y solicitar trámites a la Generalitat Valenciana como la declaración de impacto ambiental, que es un paso fundamental para llevar a cabo la planta.