Los patios coeducativos coeducativos han llegado a Elche. Cada vez son más los colegios que apuestan por fomentar la sociabilización de los alumnos durante el recreo poniendo fin a los descansos entre clases en los que «los niños ocupan las pistas para jugar al fútbol, y las niñas se quedan en los alrededores mirando», como apuntan los expertos. Por el momento son pocos los centros educativos que en la Comunidad Valenciana están implantando los denominados patios coeducativos y en Elche se pueden encontrar algunos ejemplos en centros como, por ejemplo, el Princesa de Asturias o el Clara Campoamor, donde los docentes organizan actividades diferentes cada día para fomentar la participación y la igualdad entre los escolares.

De este tema habló ayer en Elche la doctora en psicología y experta en coeducación, Sandra Molines, que participó en una Jornada sobre Patios Coeducativos, organizada por la FAPA Enric Valor, en la que se visionó el documental «Patios vivos, patios coeducativos», codirigido por Sandra Molines y Paqui Méndez, que han estudiado e investigado el uso de los patios escolares.

Sandra Molines explicó que «hoy por hoy, la mayoría de centros educativos cuentan con patios donde predomina el cemento y donde el espacio central lo ocupan las pistas deportivas que en el tiempo de recreo son utilizadas generalmente por los chicos». Por otro lado, apuntó Molines, «las chicas ocupan los espacios periféricos, y prefieren participar en juegos de grupo, o sentarse y charlar, entre otras cosas».

Para acabar con esta tendencia, que se considera más que arraigada y normalizada, los expertos proponen analizar lo que sucede en los patios desde una perspectiva de género, y concluyen que «debemos trabajar para acabar con una situación machista, que aparta del centro del patio a las niñas y niños que no juegan al fútbol».

El presidente de la FAPA Enric Valor, Txomin Angos, afirmó que «hoy en día los patios de los colegios son campos de fútbol, por eso consideramos importante difundir el proyecto de patios coeducativos, para que las familias y los docentes empiecen a cambiar el modelo, y a apostar por un tipo de recreo más integrador».

En este sentido, los expertos sostienen que los patios coeducativos fomentan la sociabilización de los alumnos, y que también suponen una forma de fomentar la igualdad y, por lo tanto, de acabar con conductas de acoso, que se suelen dar en mayor medida durante el tiempo de los recreos «cuando los alumnos más débiles se sienten más desprotegidos».

Es por ello que entre los objetivos concretos de los patios coeducativos destaca mejorar las condiciones de equidad e igualdad entre chicos y chicas, fomentar el trabajo y el juego cooperativo, la integración, y valorar la diversidad. Todo ello, apuntaron desde la FAPA Enric Valor, con el propósito de «avanzar hacia una escuela pública de calidad al alcance de todas las familias».

La experta Sandra Molines explicó que en la Comunidad Valenciana se está empezando a implantar este sistema en los patios, y que en la provincia de Castellón son varios los ayuntamientos que han querido apoyar el cambio de modelo de los recreos, en los que la implicación de los docentes resulta fundamental para dar pie a que los alumnos participen en actividades en grupo que van variando cada día. En las provincias de Alicante y Valencia la implantación de estas dinámicas es menor, pero también hay ejemplos.

«La opción de jugar al fútbol se ofrece un día al mes»

El «Princesa de Asturias» deja que los escolares escojan actividades que se realizan en el exterior y en las aulas

En Elche uno de los primeros colegios que ha empezado a trabajar en el proyecto de patios coeducativos es el Princesa de Asturias. La directora de este centro, Leticia Gómez, explica que «empezamos con unas jornadas familiares en las que nos dedicamos a mejorar las zonas de juegos con el objetivo de dar más opciones a los escolares».

De esta forma, en el patio de este colegio público los niños pueden eligir cada día entre pasar por un laberinto elaborado con cañas, pasar por un circuito hecho con troncos de palmeras, entretenerse en el huerto ecológico, jugar en un barco elaborado con palés o participar en las diferentes dinámicas de grupo que gestionan los profesores de educación física. Y en todas estas actividades se trata de fomentar la sociabilización de los niños y el trabajo en equipo.

Además, apuntó Leticia Gómez, «el fútbol solo forma parte del programa una vez al mes, el resto de días se fomentan otro tipo de actividades». En este sentido, desde este centro educativo sostienen que «todavía queda mucho trabajo por hacer para erradicar la cultura de la pelota en los patios, pero cuando se empiezan a trabajar en el tema vemos que los niños aceptan muy bien las alternativas, y que, poco a poco, se va creando una cultura diferente».

Y tan diferente que en el caso del Princesa de Asturias los escolares también puede escoger entre salir al patio y realizar actividades al aire libre, o quedarse en las que también se desarrollan dentro de las aulas, ya que lo importante «es disfrutar y compartir el tiempo del recreo, dentro o fuera del aula».