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La caída de las exportaciones de calzado provoca que las fábricas pierdan 1.000 empleos

El sector del cuero y los zapatos cuenta con 44.660 afiliados a la Seguridad Social, que son 1.081 trabajadores menos que en 2018

Trabajadores en una empresa de calzado ubicada en Elche Parque Empresarial. MATÍAS SEGARRA

Las plantillas de las fábricas de calzado están sufriendo la caída de las exportaciones. En un año el sector del cuero y el calzado ha perdido un millar de puestos de empleo, según los datos del Ministerio de Trabajo, que indican que en marzo de 2019 habían dados de alta en la Seguridad Social un total de 44.660 personas en el sector, lo que viene a ser un 2,3% menos que en marzo del 2018.

La inestabilidad en el mercado europeo está detrás de la caída de las exportaciones desde las cifras récord que se alcanzaron en 2015. Una tendencia que de una forma u otra ha acabado reflejándose en las plantillas de las empresas, que han ido perdiendo tamaño.

En este sentido, en marzo de 2018 el sector del cuero y el calzado contaba con un total de 45.741 personas dadas de alta en la Seguridad Social, que eran 1.081 empleados más de los que había en el mismo mes de este año.

Un informe elaborado por la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE), con el patrocinio de Webhelp Payment Services, destaca que las exportaciones de calzado español se estancaron en 2018 «debido principalmente a los descensos en nuestros principales mercados europeos». En 2018 las ventas al exterior alcanzaron los 2.652 millones de euros con un ligero descenso del 0,5% en valor. Las exportaciones de calzado mantienen el nivel alcanzado en los ejercicios 2014, 2016 y 2017 tras el fuerte repunte del 2015, pero no consiguen anotar un dato positivo desde 2015.

Esta circunstancia lleva, como reconocen desde las propias patronales del sector, a que durante los últimos meses haya ido cayendo el número de empleados en las empresas, que tratan de ajustar sus plantillas al volumen de producción que sale al exterior.

Una de las claves para evitar esta situación, o tratar de salvarla, es acabar con la dependencia de los mercados europeos. Es decir, que las firmas apuesten más por la diversificación de mercados, y no confíen la mayor parte de su producción a pocos clientes.

Sin embargo, la realidad indica que la mayoría de la producción de calzado español se destina a los mercados de la Unión Europea (UE), que en 2018 compraron el 79% del total de las exportaciones en volumen y el 71% en valor. Las exportaciones a países de la UE alcanzaron los 1.877,5 millones de euros y 120,4 millones de pares, con descensos del 4% en valor y del 5,3% en volumen.

44.660

Empleados en el cuero y el calzado

El sector del cuero y el calzado contaba en marzo con un total de 44.660 personas dadas de alta en la Seguridad Social.

-2,3%

Las plantillas pierden peso en un año

En un año las plantillas de empresas de cuero y calzado han registrado un descenso del 2,3%, por la reducción de las exportaciones.

-0,5%

La exportación en 2018 se quedó en 2.652 millones

Durante el 2018 las exportaciones de calzado se quedaron en 2.652 millones de euros, un 0,5% menos que en 2017.

Desde la patronal nacional destacaron «los descensos en todos nuestros principales socios europeos, que reducen las exportaciones a la UE», donde, Francia, Italia, Alemania, Portugal y Reino Unido encabezan el listado de los principales destinos.

Por otro lado, y por eso se insiste en la importancia de diversificar mercados, las exportaciones a destinos extracomunitarios ascienden a 774,6 millones de euros (31,8 millones de pares), con un crecimiento en el pasado año del 9% en valor, representando ya casi un 30% del total.

Reflexión

Para expertos y patronales la disminución de las plantillas en las empresas del sector del cuero y calzado va parejo al comportamiento de las exportaciones, en una época en la que, insisten, el mercado nacional crece a un ritmo muy lento después de haber anotado importantes descenso en el consumo.

El nuevo convenio favorecerá el relevo generacional

Patronales y sindicatos pactan fomentar los contratos para formar a nuevos empleados en oficios tradicionales

Mientras el sector pierde volumen, en cuanto a mano de obra se refiere, patronales y sindicatos siguen con la negociación para contar con un nuevo convenio colectivo.

Hasta el momento, las organizaciones empresariales FICE y AEC, y los sindicatos mayoritarios en el sector CC OO y UGT, han acordado introducir nuevas modificaciones al actual convenio en materia de permisos, protección contra la violencia de género, y derechos digitales y nuevas tecnologías.

De igual modo se han trabajado revisiones al convenio en materia de contratos de relevo para impulsar el rejuvenecimiento de las plantillas, facilitando la adquisición de experiencia del nuevo trabajador a través de esta tipología de contratos, y también en materia de trabajo a domicilio, reforzando la figura legal del mismo, sus condiciones laborales y la conciliación familiar.

Se siguen acercando posturas en cuanto al incremento de los salarios, donde los sindicatos piden más de lo que los empresarios, en un principio, están dispuestos a aceptar. Para las organizaciones empresariales el actual escenario aconseja prudencia y argumentan esta postura indicando que «las exportaciones en el primer trimestre del año están siendo flojas, aunque en 2018 se mantuvieron en línea con los dos años anteriores, pero muy inferiores a las alcanzadas en 2015».

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