David Caballero y Juan Antonio Sempere mantendrán la silla de concejales en el Ayuntamiento de Elche tras abandonar el miércoles Ciudadanos y pasarán al grupo mixto como no adscritos. Es la salida por la que han optado para estos dos meses que quedan de mandato político convirtiéndose de este modo en tránsfugas, lo que deja ahora en el tejado del alcalde, Carlos González, el sueldo que percibirán. Tendrá que firmar un decreto en el que determine qué derechos pierden ahora por ser no adscritos.

Ninguno de los dos concejales renunciarán a su acta de concejales obtenidas bajo las siglas de Cs, tal y como le pidió la dirección autonómica en cumplimiento del código dentológico. Descartan hacerlo por «responsabilidad con pueblo de Elche» y en contra de los que han «actuado desde las alcantarillas», tal y como anunciaron ayer.

El exlíder de la formación naranja y su adjunto se amparan en el trabajo realizado desde el 2015 en la corporación, poniendo como ejemplo la rebaja del impuesto de circulación que lograron a cambio de aprobar los presupuestos municipales hace dos años o la propuesta de 350 medidas «naranjas» para mejorar la ciudad.

No es el único movimiento que han realizado los dos esoles, quienes también comparecieron para anunciar que llevarán a los juzgados al la edil Eva Crisol, tras denunciarles justo esta semana ante el comité de Derechos y Garantías del partido por presuntas irregularidades en la campaña de publicidad de los autobuses urbanos.

Defienden su inocencia y lamentan sentirse «difamados» sin ninguna prueba, al haber pagado los 600 euros de la acción de comunicación con los fondos del grupo municipal y que es «totalmente falso» que pidieran a los afiliados aportaciones. No opina lo mismo la edil Eva Crisol, quien ayer se pronunció públicamente por primera vez tras el estallido de la crisis interna en la formación naranja. La futura candidata de Ciudadanos explicó que dedició denunciar «ante las quejas de afiliados en una asamblea reclamando unos pagos y al haberse encontrado hace unos días que el dinero había salido del grupo municipal».

En esta línea, Crisol, quien no quiso realizar muchas más valoraciones, sí que quiso poner en valor las siglas de su partido, apuntando a que «estamos aquí para no mirar a otro lado cuando ocurren cosas» y sachó pecho además de contar con el apoyo de la cúpula de Cs.

La concejal realizó estas declaraciones tras haber acudido a Alcaldía para poner en conocimiento del alcalde, Carlos González de manera formal las bajas de sus excompañeros del grupo municipal naranja, quienes ya no podrán utilizar el despacho del grupo municipal al que ya le han cambiado la cerradura.

Otro partido

A la espera de recibir «propuestas formales», tanto Caballero como Sempere no descartan ni formar su propio partido para concurrir a las municipales o integrarse en una formación, como ya anunció ayer este diario. Contemplan todos los escenarios.

De momento, la única fuerza que ya ha mostrado interés públicamente en repescarlos es Contigo, de Fernando Sepulcre, tal y como anunció ayer este diario. Precisamente, este partido que les ha abierto las puertas se nutre fundamentalmente de antiguos militantes de Ciudadanos que fueron dejando la formación de Albert Rivera desde las elecciones de 2015 hasta ahora.

Mientras Caballero cifraba en alrededor de 60 personas las que se dieron de baja de Ciudadanos el miércoles, fuentes internas hablan de una veintena de renuncias, una cantidad que dista mucho del 75% de la afiliación que el exlíder de la formación naranja dijo que se había marchado y que le respaldaban. Crisol se refirió ayer a «familiares y cuatro amigos» los que se han marchado de Cs.