El padre y la abuela de Aarón, el niño de dos años asesinado el pasado mes de septiembre en Elche, presuntamente estrangulado, exigieron ayer a los acusados del crimen «que digan la verdad de una vez sobre lo que pasó aquél día, que cuenten cómo murió mi hijo». La Ciudad de la Justicia de Elche acogió a media mañana una vista con la asistencia de las partes para comunicar que el caso se resolverá ante un jurado popular, una vez que haya finalizado la instrucción. Hasta ahora, los dos acusados, el padrastro como autor y la madre del niño como coautora, han ofrecido ante la jueza que instruye el caso versiones contradictorias y que no casan con los partes médicos y con la autopsia del pequeño.

El análisis forense revela que el niño murió por las secuelas causadas por un intento de asfixia. Además, los partes médicos daban muestra de maltrato que iban más allá del día en el que se produjo la supuesta paliza que llevó al niño a ingresar en la UCI Pediátrica de Alicante, tras ser atendido en el Hospital del Vinalopó, debido a su gravedad.

«Han contado ya muchas cosas y ninguna concuerda. Me gustaría que las contasen bien», señaló el padre del pequeño, aún con el recuerdo de su hijo, al que vio por última vez en abril del año pasado. El siguiente recuerdo que guarda es de Aarón en la UCI del Hospital General, a finales de septiembre, tres días antes de que falleciera.

Los dos abogados de la acusación particular -que representan al padre y a la abuela del menor- pidieron ayer que los dos acusados vuelvan a declarar, ante las contradicciones de los acusados, que se encuentran en la prisión de Fontcalent, a la espera de juicio. Ambos han pedido la prisión permanente revisable para la pareja, por asesinato y malos tratos habituales. La Fiscalía les imputa los mismos delitos, pero según señaló ayer la letrada de la abuela del pequeño, Raquel Sánchez, «aún no se ha pronunciado sobre la pena que le pedirá».

Tampoco hay fecha señalada para la celebración del juicio, que la familia espera que «sea lo más rápido posible y sirva para hacer justicia. Queremos que sea cuanto antes para pasar el trago, porque supondrá recordarlo todo de nuevo, e intentar superarlo», señalaron. «Yo soy madre. Es antinatural que un padre y una abuela tengan que enterrar a un bebé», concluyó la abuela del pequeño Aarón.