El Ayuntamiento de Elche acabó el año 2018 ejecutando solo la mitad de las inversiones del presupuesto municipal, lo que se traduce en 11 millones de euros para realizar obras y proyectos en la ciudad y las pedanías sin ser una realidad. La Concejalía de Hacienda se ampara en que el 80% de las inversiones estaban en trámites de contratación y, por lo tanto, en camino.
En total, al Ayuntamiento ilicitano le han sobrado incluyendo esos once millones, un total de 22,5 millones del año pasado, que irán a parar al remanente de tesorería. Esa cantidad, no obstante, podrá ser utilizada para inversiones si lo autoriza el Gobierno central, pero no se sabe cuándo. El ejecutivo local ha anunciado ya que prepara un plan extraordinario de inversiones para mejorar la ciudad, pero sin detallar cuáles se pondrían en marcha. Lo que sí que ha dicho la edil de Hacienda, Ana Arabid, es que se pondrán en marcha inversiones que estaban previstas en el presupuesto de 2019, que no pudo ser aprobado al frenarlo la oposición y al estar en minoría el equipo de gobierno.
El nivel de ejecución de todo el dinero que disponía el Ayuntamiento en el pasado año para mejorar la ciudad ha desatado las críticas por parte de la oposición hacia el equipo de gobierno.
El portavoz adjunto del Partido Popular, Vicente Granero, ha cargado contra la gestión municipal y ha criticado que "hayan quedado casi otros 11 millones de euros sin ejecutar en cuestiones necesarias para la ciudad y que por la desidia del tripartito van a volver a las arcas municipales a pagar deudas a los bancos".
El portavoz adjunto ha destacado "que en este sentido, el año 2018 fue el primero desde hace mucho tiempo en el que desde el gobierno central se permitió que parte del superávit presupuestario se podría destinar a inversiones financieramente sostenibles, es decir, obras, proyectos de mejora como parques, jardines, espacios públicos y no a pagar a los bancos. El superávit de 2018 alcanzó los 2,6 millones de euros de los cuales la mitad no se ha gastado y por tanto se destinará obligatoriamente a pagar a los bancos". Ha añadido "que nos sorprende que tras tanto criticar el tripartito el pago a los bancos, cuando disponen de ésta partida para inversión, de 2,6 millones de euros, la dejan sin aprovechar y se deba destinar al pago de entidades".
Ciudadanos tampoco ha tardado en reaccionar y cargar contra el tripartito, además de volver a recriminar que podría haber bajado el IBI, al haberle sobrado 22,5 millones de euros. Algo que Hacienda ya negó en su día amparándose en que no podía bajar el impuesto porque si no bajaba el techo de gasto. "Este gobierno dijo que iba a invertir en aceras, en centros sociales, en mejorar la ciudad y once millones van a parar a los bancos", ha criticado el portavoz de Cs, David Caballero.
Por contra, la edil de Hacienda ha señalado que parte de esos once millones de inversiones que no se gastaron el año pasado se pueden ejecutar en 2019 porque están financiados con préstamo y la partida pasa al año siguiente y porque lo que no está financiado con préstamo o venta de terrenos se incluye en el remanente de tesorería y se dedicará a inversiones. Con ello, ha asegurado que es falso que esos once millones vayan a los bancos como dice la oposición.
Valoración municipal
El Ayuntamiento ha explicado que el remanente de tesorería resulta de la liquidación del presupuesto del ejercicio anterior y se debe, según la responsable de las cuentas municipales, a los ingresos extraordinarios aportados por el Estado y por regularización catastral realizada por el Ministerio de Hacienda.
"Como magnitudes destacables del presupuesto de 2018 destaca por un lado la capacidad de financiación del Ayuntamiento, que a 31 de diciembre de 2018 es de 36 millones de euros. Si a esta cifra se le resta el importe de los préstamos a los que se ha hecho frente en el citado ejercicio tenemos la magnitud del superávit presupuestario, que es de 6,6 millones de euros", ha explicado Arabid.
"De la liquidación presupuestaria se desprende que cumplimos con el techo de gasto establecido legalmente y también, muy holgadamente, con el límite de endeudamiento, que ha finales del año pasado se había reducido a un 24,19%", señala la concejala.
Por lo que respecta al remanente de tesorería, la concejala ha informado de que "no es una magnitud estrictamente presupuestaria, no se circunscribe al presupuesto de 2018, sino que tiene en cuenta toda la situación económica del Ayuntamiento y quedaría en los 22,5 millones de euros".
"Cumplimos de manera ajustada con el techo de gasto, lo que quiere decir que no podíamos utilizar el dinero del remanente de tesorería dentro del presupuesto de 2018 porque hubiéramos rebasado ese límite legal establecido por el Estado. Hablamos de 22 millones de euros y el Equipo de Gobierno está a la espera de que se habilite, tal como se ha venido haciendo durante los últimos años por parte del Gobierno central, la posibilidad de hacer inversiones financieramente sostenibles. En la medida es que esto se concreta llevaremos a cabo un segundo plan extraordinario de inversiones para destinar esos 22,5 millones a inversiones pendientes del proyecto de presupuesto de 2019 y otras que redunden en beneficio de la ciudad y que mejoren las dotaciones públicas de los barrios y de las pedanías", ha manifestado Ana Arabid.
