Los informes forenses de los dos acusados de matar a Aarón, el niño de dos años que falleció en Elche el pasado mes de septiembre tras permanecer ingresado varios días después de recibir varios golpes y ser estrangulado, descartan una eximente por estar bajo los efectos de las drogas. Así lo señalan los informes realizados por los peritos de la Ciudad de la Justicia de Elche al padrastro del niño, acusado de cometer materialmente el crimen y a la madre de la víctima, ambos acusados del delito de homicidio. En un primer momento, la defensa trató de alegar que ambos estaban bajo los efectos de las drogas, ya que eran consumidores habituales.

Otro de los argumentos dados por la defensa para eludir las acusaciones de maltrato continuado que también le imputan tanto la Fiscalía como la acusación particular es que parte del resto de golpes que presentaba el pequeño tras su ingreso en el hospital el pasado 13 de septiembre de 2018 fueron fruto de un accidente de coche que sufrieron esa misma mañana de camino al Hospital del Vinalopó. Una vecina los llevó en su coche después de que se presentaran en su casa con el niño en brazos, inconsciente, y con un fuerte hematoma en la cabeza. Tal y como señaló esta vecina, tuvieron un leve choque por alcance, pero según el criterio de la Fiscalía y de la acusación particular, ejercida por la letrada Raquel Sánchez Navarro, nada grave o que les ocasionara lesiones a ninguno de los ocupantes del vehículo.

La Fiscalía ya ha solicitado a la compañía de seguros los documentos que acrediten los daños ocasionados al vehículo para determinar si son compatibles con las numerosas lesiones que presentaba el pequeño.

Autopsia

Sea como fuere el resultado de la autopsia es claro: Aarón murió a causa de un estrangulamiento, por lo que el resto de golpes son secundarios en cuanto a la imputación del delito de asesinato, si bien sí son determinantes para el delito de maltrato habitual que también se les imputa a la pareja. Los informes hospitalarios apuntan a que así fue, ya que el pequeño presentaba golpes de varios días atrás, por lo que descartarían que los hematomas fueran fruto de un episodio puntual o del accidente de tráfico del día de su ingreso.

La acusación particular, que representa a la abuela del pequeño -su padre está personado con otro abogado- pedirá para ambos la máxima pena, la prisión permanente revisable. La magistrada del Juzgado de Instrucción 4 de Elche ha citado a todas las partes el próximo 26 de marzo con el fin de transformar el caso a un tribunal de jurado, por lo que la instrucción judicial está prácticamente finalizada.