Una patrulla de la Policía Nacional de Elche resultó herida tras una detención realizada hace unos días en el barrio de Los Palmeras. Unos vecinos llamaron a Emergencias tras escuchar martillazos en el interior de un edificio por parte de dos hombres que presuntamente estaban tratando de reventar una puerta de una de las viviendas. Los agentes les sorprendieron in fraganti y uno de ellos la emprendió a golpes con los agentes, hiriendo a uno de ellos de varios puñetazos y patadas por lo que acabó detenido.

Pero esta no fue la única agresión que sufrieron los agentes. El otro implicado en el presunto asalto también fue trasladado a Comisaría, únicamente para tomarle declaración por lo que acababa de suceder. Lo que no esperaban los agentes es que al volver al lugar de los hechos tres familiares del detenido también la emprendieron a golpes contra los agentes en circunstancias aún por aclarar.

Llaves en un ojo

Se trataba de una mujer y dos hombres. La primera le dio varias patadas a uno de los policías, mientras que otro de los implicados sacó unas llaves y amenazó con clavárselas en los ojos a los integrantes de la patrulla. El tercer participante en esta agresión se abalanzó sobre ellos de forma muy agresiva hasta el punto de que arrancó el chaleco del uniforme a uno de ellos.

Los policías lograron reducir a los tres familiares del detenido, que acabaron también arrestados y pasaron ayer a disposición judicial. La jueza de Instrucción 2, en funciones de guardia, dejó en libertad a los cuatro agresores-el detenido inicialmente y sus tres familiares- aunque con cargos, por un delito de atentado contra la autoridad.

El arrestado mientras intentaba entrar en la vivienda tendrá que sumar a la acusación un delito de daños y un atentado en mayor gravedad. Incluso durante el corto traslado desde Los Palmerales a la Comisaría de la Policía Nacional no dejó de dar patadas al coche policial y a la mampara de seguridad que separa a los agentes y a los arrestados en el interior del vehículo.