La asociación de vecinos de Peña las Águilas ha reclamado al Ayuntamiento de Elche que dote a esta pedanía de alumbrado público de una vez por todas. Se apoyan en parte en una decisión de los tribunales de 2007, pero, sobre todo, en el hecho de que como, cualquier propietario ordinario, pagan su correspondiente impuesto de bienes inmuebles (IBI).

Los residentes en este enclave siguen sin comprender cómo a estas alturas todavía no cuentan con iluminación en calles y caminos, sobre todo después de que el propio Ayuntamiento haya reconocido oficialmente que se trata de una zona urbana. Los vecinos han conseguido hasta la fecha plantar cara a Correos, que trató de eliminar el reparto domiciliario finalmente sin éxito, y también que se acometan por fin las obras millonarias para dotar a esta pedanía de alcantarillado, una actuación que sigue su curso.

De hecho, desde la asociación de vecinos se considera que se podía haber aprovechado el movimiento de tierras de todos estos meses para introducir el cableado necesario y demás infraestructura de cara a dotar la partida de iluminación pública.

Los afectados recuerdan al Ayuntamiento que existe una sentencia de julio de 2007 del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 en la que se «condenó al Ayuntamiento a que implantara los servicios de alcantarillado y alumbrado público» en un tramo de unos 250 metros en Peña las Águilas, en concreto en el Camí de Casto.

Apelación

Dicha sentencia fue apelada por el Ayuntamiento ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana, que la desestimó el 7 de junio de 2010, confirmando la sentencia del Contencioso-Administrativo.

«Siendo firme la sentencia, con fecha 24 de septiembre de 2013, el Juzgado de los Contencioso-Administrativo nº1 de Elche dictó auto ordenando al Ayuntamiento de Elche la implantación de los servicios de alcantarillado y alumbrado público en la zona de Peña las Águilas, exclusivamente con la extensión necesaria para que dichos servicios se presten en la parcela de la recurrente», indica la asociación vecinal, al tiempo que aclara que todo ello fue gracias a un vecino, Albero Padilla, que acudió a los tribunales con esta reivindicación al menos en el tramo del Camí de Casto.

Pero el periplo judicial no acaba ahí. Según los afectados, en diciembre de 2014 el citado juzgado tuvo que requerir al Consistorio ilicitano para que en dos meses cumpliera con la sentencia, «a lo que se hizo caso omiso», aseguran las mismas fuentes.

El 9 de marzo de 2016, el alcalde pedáneo dirigió un nuevo escrito al Ayuntamiento de Elche insistiendo en esa petición de dotar a esta zona de alumbrado, a lo que se contestó que no era posible acceder a lo solicitado «por no existir partidas presupuestarias disponibles para el alumbrado público» en Elche.

El 31 de julio del pasado año, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº1 requería al Ayuntamiento para que informara en cinco días sobre el cumplimiento de la sentencia y «hasta el momento únicamente consta como ejecutada la sentencia parcialmente, respecto al servicio de alcantarillado, pero no así respecto a la instalación del alumbrado», según la asociación vecinal.

Ante todo ello, los residentes de Peña las Águilas reclaman no solo la iluminación en el camino que expresamente contempla la sentencia, sino que se haga extensiva a toda la partida coincidiendo con las áreas donde está aprobada la ejecución del servicio de alcantarillado.

Desde el Ayuntamiento se comprende la aspiración de Peña las Águilas y se considera que en última instancia habrá que ver caso por caso y, en aquellos en que los vecinos tengan razón y la vía sea pública, habrá que diseñar un plan de actuaciones progresivo. Lo que sí tiene claro el Consistorio es en que no puede acometer todas las obras a la vez, por lo que tal vez se podría planificar cada año inversiones en este sentido. Y lo apunta después de que el mismo juzgado citado haya fallado recientemente en contra del Ayuntamiento y le obligue a instalar de alumbrado público en la urbanización de Bonavista. Y es que los vecinos de Peña las Águilas no quieren ser menos.