Con el objetivo de mejorar el conocimiento ginecológico de las patologías de la adolescencia, el Centro de Experimentación Cyborg de la Universidad Miguel Hernández (UMH) ha desarrollado unas jornadas sobre reproducción humana y embriología, cuyo plato fuerte ha sido un taller formativo en el que se ha ensayado en cadáveres, por primera vez, técnicas para la reconstrucción quirúrgica de la vagina. Entre otras patologías, los expertos sanitarios de todo el mundo llegados al campus de Sant Joan d'Alacant han trabajado sobre la poliquistosis ovárica, el sangrado uterino anormal, la mutilación genital, la endometriosis, el proceso inflamatorio pélvico, la torsión o las lesiones ováricas.
Cirujanos pediátricos, ginecólogos y urólogos se han dado cita en las instalaciones de la Universidad ilicitana a lo largo de esta semana con el propósito de abordar los problemas vaginales que se dan en la adolescencia de una manera mucho más conservadora que en la actualidad, con la meta de salvar la futura reproducción de las adolescentes. Una acción a evitar que esclarece el trabajo realizado estos días en Sant Joan es la de quitar el útero entero cuando se dan casos de malformaciones.
En total han sido 65 asistentes llegados de diversos continentes los que se han dado cita esta semana en la provincia, con representación de más de una quincena de países. Muchos de estos expertos son ponentes de alto prestigio internacional, entre los que destacaban el presidente de la ESGE, Grigoris Grimbizis, y la coordinadora del grupo de cirugía reproductiva de la ESHRE, Michelle Nisolle. Estas eminencias del sector sanitario han tratado también en los cadáveres, que son de hombre, la enfermedad inflamatoria pélvica o los casos de bebés que nacen sin vagina o de niñas con un grado menstrual muy fuerte.
Al frente de esta iniciativa ha estado la profesora del Área de Obstetricia y Ginecología de la UMH Maribel Acién. «La cirugía en cadáveres ha sido la gran innovación, ha supuesto un gran reto porque nunca se habían empleado estas técnicas. Los participantes internacionales se han ido muy sorprendidos con lo que han visto, ha gustado mucho la preparación que hemos hecho. Han aprendido nuevos métodos de "cambio de sexo" y la experiencia con cadáveres ha funcionado bien. Esto es un tanto a nivel sanitario que nos apuntamos en la provincia», ha declarado la profesora universitaria como valoración de este encuentro.
Simulación real
Los talleres de cirugía realizados en el centro Cyborg han contado con un espacio para el entrenamiento quirúrgico dotado con tecnología puntera para la formación sanitaria. En el campus de la UMH los participantes han podido realizar una simulación real en pacientes con cuatro cadáveres de varón, a los que se ha sometido a una reconstrucción total de la vagina. Estas demostraciones han sido seguidas en directo por los asistentes a las jornadas internacionales y han sido grabados, con el objetivo de generar un material audiovisual que también servirá para la formación posterior.
Esta tecnología puntera que dispone la UMH permite que los cuerpos donados a la ciencia revivan en el interior del centro Cyborg, hasta el punto de que los cadáveres son capaces de sangrar y respirar mientras se realizan diversas operaciones sobre ellos, en este caso concreto vinculadas con la vagina. Este «movimiento» de los cuerpos dota de más realismo las prácticas que realizan los alumnos de la Facultad de Medicina y supone un gran avance, que abre la puerta para que la provincia se consolide como una potencia internacional en el ámbito de la salud.
Unas prótesis neovaginales que han sido premiadas
Las prótesis neovaginales que se han utilizado en las cirugías están diseñadas por un grupo multidisciplinar de la UMH, con la profesora Maribel Acién al frente. La calidad del material es tan importante que ha sido premiado por el MIT de Boston, que lo ha definido como uno de los «proyectos con mayor potencial para mejorar la vida de las personas». La empresa surgida de la UMH 3D Surgical Technologies es la encargada de desarrollar este producto, que se fabrica con tecnologías de diseño paramétrico e impresión 3D para que los pacientes las reciban con las medidas de su propio cuerpo.
