El concejal de Aperturas, Carlos Sánchez, confirmó ayer que se van a adoptar las medidas necesarias para acatar la sentencia del Tribunal Supremo que ha anulado dos artículos de la ordenanza municipal de mesas y sillas de la ciudad por considerar que vulneran el derecho de movilidad de las personas invidentes. Así, ha anunciado que se estudiarán las terrazas existentes y se procederá a su «reorganización». A juicio de Sánchez Heras, la resolución judicial no supone la eliminación de las terrazas de mesas y sillas que hay en la actualidad, sino que lo que se va a proceder es a «adaptarlas» a los que ha dicho la sentencia del TS, que insta a dejar libre el espacio frente a las fachadas de los edificios para que no supongan un obstáculo para personas invidentes o de movilidad reducida.

Sánchez avanzó que el primer paso que se va a dar es el de realizar un estudio de las terrazas que existen en el municipio para a partir del mismo analizar de manera individualizada cada caso y dar la solución precisa para cumplir con la resolución del TS. Solo en la zona centro del casco urbano se estima que hay afectadas por la resolución judicial en torno a 18 terrazas de mesas y sillas.