La llegada de la Alta Velocidad a Elche se producirá en el horizonte de este verano. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) fija en ese plazo la entrada en funcionamiento de la infraestructura en la ciudad tras haber finalizado las obras en la estación de Matola y después haber concluido los trabajos en las vías. La entidad pública que depende del Ministerio de Fomento ratifica así la fecha que anunció José Luis Ábalos en septiembre del año pasado. Todo ello pese a que no se espera que para verano de este año esté listo el tramo Monforte-Murcia, pues su entrada en servicio no está prevista al menos hasta 2020.

Si bien desde Adif han asegurado a este diario que siguen trabajando con la previsión para cumplir esos plazos e insisten en que no hay que concebir como un tramo único la línea de la Alta Velocidad. De este modo, si el Gobierno central, finalmente, logra cumplir con esos cálculos el AVE podrá circular en dirección Madrid, Albacete, Monforte del Cid hasta llegar a Elche. La voluntad es esa, técnicamente será posible, según Adif, aunque después habrá que ver cuántos trenes llegan a Elche y con qué frecuencias, lo que ya depende de Renfe.

Actualmente, las obras de infraestructura, vía e instalaciones de seguridad y comunicación están concluidas en todo el tramo Monforte del Cid-Beniel, estando en fase de pruebas. Asimismo, la catenaria se encuentra completamente instalada y con tensión desde Monforte del Cid hasta El Reguerón (accesos a Murcia). La infraestructura dispone de tensión eléctrica desde mediados de diciembre del año pasado.

Mientras, según Adif, quedan pendiente de finalizar los trabajos en las vías de apartado de la estación de Beniel y de Orihuela para que el AVE también pueda llegar. Tras el correspondiente periodo de comprobaciones y ajustes, se iniciarán las circulaciones en pruebas con un tren auscultador de Adif.

Ésta es la hoja de ruta que maneja el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias y que afectan a Elche, donde los plazos para la tan esperada y reivindicada infraestructura se han ido retrasando. El actual ministro de Fomento (PSOE) apuntó primero a que la línea iba a estar en funcionamiento en septiembre de 2018. Ese baile de fechas vino después de que su antecesor del PP, Íñigo de la Serna, dijera que el AVE entraría en funcionamiento en la primavera del pasado año.

De hecho, el servicio ha sufrido demoras continuas desde que en 2010 salieran a licitación los primeros estudios. Tanto es así que desde hace una década hay voluntad de que Elche pueda tener AVE. Mientras tanto, las reivindicaciones por parte del Ayuntamiento ilicitano y de los grupos de la oposición han sido constantes hacia el Gobierno central. así como la conexión de la terminal de Elche con la línea de Cercanías.

Tropiezos

Antes de que comenzaran las obras en la estación de Matola se llegó hablar de que el AVE llegaría a Elche en 2015. Sin embargo, el retraso en adjudicar las obras del apeadero lastraron ese plazo inicial. La inversión para la terminal cayó, además, a la mitad de lo establecido en la licitación y al final se cuantificó en 6,5 millones de euros. Mucho antes, en el año 2010, el Ministerio de Fomento ya sacó a licitación el estudio informativo de la alta velocidad a su paso por Elche.

La infraestructura debía completarse en 10 meses y, desde que se iniciaron los trabajos en la estación, en enero de hace tres años, ha sido ahora cuando han terminado. Hace un ejercicio, Adif activaba la maquinaria para poner a prueba las vías. Un tren laboratorio empezó a hacer comprobaciones sobre el terreno, al igual que una auscultadora con sensor láser.