El juicio contra la mujer de 64 años acusada de matar a su marido, enfermo de alzhéimer en marzo de 2017 en Cox, volvió a repetirse ayer después de que un jurado popular lo declarara nulo en octubre de 2017, al rechazar el acuerdo al que llegaron la Fiscalía y la defensa, realizada por el abogado Javier Roca de Togores, para reducir la pena por enajenación mental, obligando a repetirlo. En un primer momento, el Ministerio Público pedía una pena de 17 años de prisión por el asesinato. La mujer confesó los hechos que se le imputaban durante el juicio, pero la defensa pedía que se tuviera en cuenta la situación en el que este se produjo, ya que la mujer arrastra una depresión desde hace años, tras cuidar a varios familiares dependientes. Una situación que se había agravado al avanzar gravemente en los meses antes del crimen la enfermedad de su marido, que no la reconocía y no podía valerse por sí mismo, lo que había ocasionado un grave sufrimiento a su cónyuge.

Ahora, y pese a que la Fiscalía aceptó a mitad del juicio esa eximente incompleta por enajenación mental, por lo que la pena podría reducirse hasta los nueve años, el Ministerio Público ha optado por mantener la acusación, aunque manifestó en el juicio que podría cambiar, y continuar con la acusación inicial de 17 años de prisión. La Fiscalía es la única acusación en el juicio, ya que los dos hijos de la víctima, a su vez hijos de la agresora, no han presentado cargos contra su madre al entender, como sostiene la defensa, las circunstancias en las que se produjo el estrangulamiento de su padre. La defensa pide aora una eximente completa.

Por tanto, en un principio, el juicio se repetirá íntegro, tal y como se celebró entonces, pero sin ese acuerdo final entre la Fiscalía y la defensa. La primera sesión tuvo lugar ayer en la Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Alicante, con sede en Elche. Esta sesión sirvió para que la acusada prestara su declaración, reconociendo los hechos. Así, contó la situación personal en la que se encontraba, y cómo estaba confusa tras el crimen, sin saber qué había pasado. Tras el suceso, habría intentado quitarse la vida con una cuerda, ahorcándose, pero falló, tal y como sostiene la defensa. Así, el objetivo del crimen habría sido acabar con el sufrimiento de su marido para, después, acabar también con el suyo.

Declaraciones

Durante la jornada de ayer también se le tomó declaración a las sanitarias que acudieron a la llamada del hijo de la pareja, quien descubrió lo sucedido a la mañana siguiente y dio el aviso a Emergencias. Al preguntar por lo sucedido, escucharon la versión que había contado la mujer a su hijo: que el hombre había sufrido una caída, lo había reincorporado y acostado en el sofá y luego había descubierto que había fallecido. el juicio seguirá hoy y mañana.