El Gobierno francés ha concedido una autorización excepcional a una empresa nacida en la Universidad de Alicante para que pueda comercializar como producto fitosanitario su denominado Phoemyc+, nombre comercial del organismo vegetal Beauveria bassiana 203, un hongo autóctono de Elche que está demostrado que acaba con el picudo rojo de las palmeras de forma totalmente inocua para el resto de plantas y seres vivos.

En la actualidad, los países miembros de la Unión Europea están evaluando el informe previo (DAR en su acrónimo en inglés) para su registro como sustancia activa de este hongo que precisamente fue localizado en el Palmeral de Elche.

Ese DAR está circulando por los países europeos para que den su parecer previo, para así obtener la autorización definitiva y se pueda llevar a cabo su registro como sustancia activa.

La autorización excepcional, como ahora ocurre con el caso de Francia, la da el gobierno de cada país, pero la autorización definitiva tiene que ser una decisión común de la UE para determinadas zonas o para todo el territorio europeo.

La autorización excepcional ha sido solicitada al Gobierno francés por parte de la Federación Regional de Defensa contra los Organismos Nocivos (FREDON-PACA en su acrónimo francés) y permitirá utilizar en el país vecino el hongo como un producto fitosanitario biológico ante la eliminación, vía legislativa, de todos los tratamientos químicos que se han venido utilizando en los últimos años para combatir esta plaga que arrasa los palmerales de los países mediterráneos.

Ensayos de eficacia

Para el registro de la Beauveria bassiana 203 como sustancia activa, Glen Biotech, la empresa nacida en la UA impulsora de este producto fitosanitario, ha estado trabajando durante los últimos años en la elaboración de un amplísimo dosier que incluye también el resultado de los diversos ensayos de eficacia del producto, según indican desde esta mercantil.

Este documento se tramitó a través de Holanda -como miembro de la Unión Europea, porque en principio tiene bastante experiencia en este campo y porque sus trámites burocráticos suelen ser más ágiles- que en junio pasado emitió el mencionado DAR y lo remitió al resto de países. El plazo de evaluación es de 12 meses y debe finalizar con el registro de la Beauveria bassiana 203 como sustancia activa y, por tanto, con el permiso definitivo para su uso como producto fitosanitario.

Berenice Güerri, investigadora y consejera delegada de Glen Biotech, aclara que Francia se convierte así en el primer país del mundo en comercializar este hongo autóctono ilicitano, después de aclarar que en Elche, desde aproximadamente el año 2013 y durante periodos muy determinados, se ha utilizado un producto parecido, pero no igual. El que ahora Francia quiere aplicar es incluso más eficaz que el que se ha probado en el Palmeral de Elche y que en estos momentos ya no está autorizado, ya que los permisos suelen tener una caducidad de pocos meses.

Desde la citada mercantil se indica también que, si todo marcha según lo previsto, España será, después de Francia, el segundo país en otorgar una autorización excepcional a esta nueva sustancia activa que nació de una tesis doctoral y de una investigación pública.