La primera parada de este programa Erasmus+ ha comenzado en nuestra provincia, pero posteriormente alumnos y docentes del IES Playa San Juan se trasladarán en los próximos meses a los otros cinco países para, también como han hecho aquí, alojarse en las casas de sus compañeros europeos y descubrir sus respectivas culturas y tradiciones. Pero mientras tanto, los estudiantes de la UE que el martes recalaron en Alicante ya han degustado algunas delicias de nuestra tierra. «Hemos probado el helado de turrón y el chocolate con churros», apuntaba en inglés un joven rumano en un momento de la visita a la Casa de La Festa.

Por su parte, los estudiantes de los países del norte, como por ejemplo los procedentes de Lituania, destacaban la buena climatología de la que gozamos, mientras una profesora del IES Playa San Juan explicaba que incluso éstos se habían bañado en la playa, puesto que ahora en sus lugares de residencia está nevando, como acreditaban con fotos en el móvil.

Otros alumnos, tras asistir a la proyección de un audiovisual sobre el Misteri, después de haberse adentrado en la basílica de Santa María para que conocieran dónde y cómo se escenifica La Festa, también reseñaban que en sus países no tienen palmeras, por lo que el paisaje les sorprendía.

«¿Como casi sin agua y además de mala calidad, salada, se puede desarrollar aquí la agricultura?», indicaba uno de los guías, Juan León, que había preguntado un estudiante, mientras otros indagaban: ¿dónde está el río?,en referencia al Vinalopó (estando al lado), ya que en sus países de origen los cauces llevan importantes caudales de agua.

Los jóvenes también pudieron ayer redescubrir el concepto de oasis, ya que todos imaginamos agua y camellos en el desierto, cuando, según explicaban los expertos, Elche en verdad es un oasis, un lugar donde se organizó un sistema de riego que, además de nutrir a los huertos hizo, primero, mover con el vapor la industria textil, y luego la del calzado, desarrollando así la economía local.