El alcalde, Carlos González, y el gerente de Aparcisa, Alvaro Gordillo, han mantenido una reunión este mediodía sin invitados y en un lugar discreto y que, como estaba previsto, se ha cerrado sin ningún acuerdo, según ha podido confirmar INFORMACIÓN. El regidor ha ofrecido a la empresa pagar los gastos que se han generado por la empresa desde que asumió el proyecto, hace ahora tres años y medio; mientras el responsable de la adjudicataria de las obras del nuevo mercado y el aparcamiento subterráneo le ha dicho que él tiene un compromiso con los placeros y que piensa construir porque eso es lo que dice el contrato.

El alcalde ha llegado a ofrecer el hacerse cargo de las obligaciones generadas por Aparcisa con los placeros para intentar forzar que éste se abriera a un acuerdo, pero su posición no ha variado. Ahora es el Ayuntamiento de Elche el que tiene que mover ficha, lo que pasa por un acuerdo que suponga la notificación a la empresa de que el contrato está roto, algo que no será fácil ni rápido.