Las empresas de alquileres de coches que operan en el perímetro del aeropuerto ya vaticinan un colapso de tráfico en las vías de servicio cuando entre en funcionamiento la mejora de los accesos a la terminal que Fomento tiene previsto acometer de manera inminente. Lamentan que el proyecto que tiene el Gobierno central redactado olvida a las instalaciones que prestan servicio a los turistas que llegan a El Altet.

Con la duplicación de la Nacional 338 no se contempla un acceso directo desde las vías de servicio, que utilizan este tipo de empresas, a la principal rotonda que da entrada al aeropuerto, lo que desde la Asociación Empresarial de la Comunidad Valenciana de Alquiler de Vehículos (Aecoval) consideran un error. Tras las obras, los que salgan de esos establecimientos tendrán que usar la vía de servicio y desplazarse en dirección Torrellano y llegar a la rotonda situada frente al colegio Aitana para poder entrar a la terminal. Y así en el sentido inverso. La patronal advierte de que se creará un «tráfico imponente» en la vía de servicio para acabar haciendo uso de la rotonda principal, con el consecuente riesgo de accidentes.

Es la queja que ya han hecho llegar a Fomento los empresarios de negocios de alquiler, quienes, no obstante, ven necesaria la duplicación de la calzada ante la elevada demanda de vehículos que soporta la nacional, siendo muy frecuentes los problemas de congestión que repercuten incluso en las carreteras próximas, ocasionando de forma habitual retenciones en la A-70.

La falta de una conexión directa a la rotonda de acceso al aeropuerto a través de la vía de servicio no es el único inconveniente con el que van a tener que lidiar las empresas de este sector. Y es que una decena están afectadas por las expropiaciones forzosas y de urgencia que ya ha anunciado el Gobierno para iniciar las obras de construcción de los accesos. Así lo cuantifican la patronal, desde donde también advierten que cuatro establecimientos se verán abocados al cierre porque la ocupación de los terrenos les impedirá poder mantener la actividad, al exigirles unos metros mínimos. De hecho, algunos de esos negocios afectados ya están buscando otros terrenos para poder reabrir.

En total, la duplicación de la calzada en la N 338 implicará expropiar 155 parcelas del término municipal de Elche, lo que suponen 222.350 metros cuadrados. De Alicante hay una quincena de parcelas afectadas, unos 3.600 metros. La mayoría sufrirán un retranqueo en sus terrenos, lo que les obligará a desplazar el vallado.

Estas últimas semanas, los afectados por las expropiaciones han mantenido reuniones con Fomento y apuntan al primer trimestre de 2019 el momento en el que se levante el acta de ocupación forzosa. A partir de ahí, recibirán un ingreso a cuenta y se podrán comenzar con las obras. Desde Asociación Empresarial de la Comunidad Valenciana de Alquiler de Vehículos señalaron que todavía desconocen la cantidad que recibirán por las expropiaciones.

Las obras

La carretera N-338 constituye el único acceso al aeropuerto de Alicante-Elche, cuyo tráfico aéreo se encuentra entre los cinco primeros de España. En 2017 superó los 13 millones de viajeros. Esta vía enlaza la autovía A-70 de circunvalación de Alicante con la carretera N-332, que constituye el principal eje de comunicación del litoral sur de la provincia. Por este motivo, además del tráfico generado por el propio aeropuerto, funciona como circunvalación de la capital. Su intensidad media diaria, en 2015 superó los 26.000 vehículos, por lo que son frecuentes los problemas de congestión.