El cambio de ubicación del mercado medieval, que abrirá sus puestas en Elche del 25 al 28 de octubre, tiene dividido al sector del comercio y la hostelería del centro. El Ayuntamiento decidió hace unos meses sacar los puestos del centro histórico, en torno a la basílica de Santa María, para evitar, como ya sucedió en 2016, que el ruido que genera esta actividad afecte a las representaciones del Misteri d'Elx, que por ser año par celebra su ciclo otoñal. El mercado se instalará en el Paseo de la Estación. Sin embargo, la iniciativa no ha sido bien recibida por todos los establecimientos de la ciudad, que evidencian su preocupación conforme se aproxima el próximo festival medieval.
Por un lado están los comercios que aplauden la medida. Se trata de establecimientos de calles como Obispo Tormo, que llevan varios años denunciando que la instalación de los puestos de mercado medieval delante de sus negocios les resta visibilidad, y, por lo tanto, clientes, pese a que por las calles pasen durante esos días miles y miles de personas.
Estos comercios, que llegaron a proponer aumentar el número de calles para ubicar el mercado medieval y llevarlo a otras en las que no se haya colocado anteriormente, aplauden la medida. «Parece que por fin nos ha escuchado», decían estos días. Se da la circunstancia de que una cafetería de esta calle no podía montar su terraza durante los días en los que se llevaba a cabo el evento turístico.
La queja, en este tema, llega desde los establecimientos de hostelería, principalmente de la plaza del Congreso Eucarístico. En esta zona sostienen que la instalación del mercado medieval en la plaza repercute muy positivamente en sus negocios, y que incluso contratan refuerzos para atender al público que pasa por el centro.
Unos refuerzos, apuntan desde uno de los establecimientos afectados, que ahora no van a ser necesarios si se traslada, como está previsto, el mercado a la zona del Paseo de la Estación y el entorno del Palacio de Altamira. «Aunque el mercado tenga puestos de comida, muchos clientes también consumían en nuestras terrazas», reconocen desde uno de los establecimientos de la plaza del Congreso Eucarístico, mientras desde otro indicaban que «el cambio nos quita trabajo y habíamos contratado personal para cubrir esas fechas».
El motivo del cambio, indicaron desde el Ayuntamiento de Elche, es que el mercado no interfiera en los ensayos generales del Misteri, que se realizarán los días 26 y 27 de octubre.
Desde hace varios años el mercado sólo se instala un fin de semana. Anteriormente, cuando el festival tenía más volumen, el mercado se instalaba dos semanas, una en el entorno de la basílica, y la siguiente, que es en la que se celebra el Misteri los años par, fuera del centro. Sin embargo, desde hace unos años la actividad sólo se realiza una semana, y este año es la que coincide con el drama asuncionista, que se quiere proteger.
