n Ponía anuncios en internet de viviendas para alquilar que, a la hora de la verdad, no existían. O al menos eso es lo que se desprende de la investigación realizada por los agentes de la Policía Nacional de Elche, a raíz de una denuncia que culminó con la detención el pasado miércoles de una mujer que, al parecer, se hacía pasar por una agente inmobiliaria para estafar a, al menos, 13 personas, a las que le llegó a cobrar una fianza por el alquiler de viviendas que no existían.

Las investigaciones continúan abiertas, pues los agentes no descartan que hayan más afectados. Hasta el momento, el fraude asciende a cerca de 6.000 euros, según informaron ayer desde la Comisaría de la Policía Nacional de Elche. Las víctimas contactaban con la detenida a través de anuncios que esta ponía en diferentes plataformas de internet dedicadas al alquiler inmobiliario. La arrestada tenía tapadera, pues aprovechó su antiguo empleo en una inmobiliaria para poder engañar a sus víctimas, haciéndoles creer que el piso que iban a arrendar era una oferta que no podía llevarse a cabo a través de su agencia inmobiliaria.Una vez contactaba con las víctimas les enseñaba un piso donde ella había estado alquilada y del que conservaba todavía la llave de la vivienda y del portal del inmueble. Las alarmas saltaron hace dos meses, cuando uno de los estafados denunció los hechos en la Comisaría ilicitana. Fue entonces cuando los agentes iniciaron la investigación, que continúa abierta pese a la detención de la mujer, que ha quedado en libertad con cargos tras pasar a disposición judicial.

Reserva

La víctima de la primera denuncia hizo el pago en concepto de reserva por un piso de alquiler que nunca llegó a disfrutar. Cuando los afectados realizaban el pago en concepto de reserva la acusada ponía excusas de la tardanza en dar las llaves o no respondía al teléfono en ningún momento.

El perjuicio para las víctimas era doble, el económico por el dinero que desembolsaban y la «situación de desamparo total» en la que se encontraban cuando llegaban al lugar y descubrían la estafa, tal y como manifestaron los agentes ayer en el comunicado oficial que se hizo público.

Anuncio, cita y señal

Para cometer las estafas seguía varios pasos y siempre actuaba de la misma manera. Primeramente creaba los anuncios en conocidas páginas web de alquiler para después contactar con los interesados a través de las plataformas web o por el móvil y concertar una cita, ver el piso y que le diesen una señal.

Los afectados descubrían el engaño una vez se personaban en la vivienda prometida. Era entonces cuando intentaban contactar sin éxito con la arrendadora ya que nunca respondía al teléfono. Sólo atendía cuando le llamaban desde otro número que no conociera. Al verse cercada respondía dándoles continuas excusas para dilatarlo en el tiempo.

El número de víctimas que se ha podido acreditar asciende a un total de 13 personas, todas de la provincia de Alicante. Cobró cantidades desde los 150 a los 900 euros.