n El modelo ferial están continuamente en entredicho. Prueba de ello es el rumbo que lleva la feria de calzado de Madrid, que FICE da por agotada.

P ¿Qué está pasando con las ferias?

R El modelo tradicional ha dejado de funcionar como lo hacía hace diez, veinte y treinta años. Las formas cambian y lo ha hecho la forma de comunicarse entre empresas y clientes. También se está produciendo otro fenómeno, la concentración de la distribución se ha acelerado más porque han entrado otros actores de la distribución online que han asumido el mismo proceso de concentración con más rapidez. Esto supone que cada vez hay menos actores, y el canal multimarca, más independiente, que es el que iba a las ferias, no sólo ha sufrido mucho durante la última crisis, sino que además se ve abocado a una nueva redistribución. Al final vemos que quedan menos actores en el proceso de distribución que son los que acuden a los certámenes feriales. Eso hace también que las marcas también inicien el proceso de concentración. Cada vez habrá menos marcas pero más grandes, con mucha más economía de escala. Y eso afecta a las ferias.

P ¿Por eso piden transformar el evento de Madrid?

R Nosotros creemos, y llevamos meses hablando con Ifema, que en España necesitamos una feria nacional, porque somos el segundo productor europeo, y porque necesitamos un escaparate para nuestras marcas en España, y no sólo para el mercado nacional, sino también para países americanos y árabes. Nos sorprende actualmente el interés de operadores árabes interesados en abrir franquicias en sus países. Pero no se puede mantener el mismo modelo de feria tradicional, que ahora no funciona.

P ¿A dónde quieren llegar?

R Buscamos un modelo que permita mostrar al expositor español, para que le resulte interesante, y en el que los beneficios sean superiores a la inversión que se tenga que hacer. Creemos que no debemos plantear un certámen en el que se vendan metros cuadrados, sino vender conceptos que permitan posicionar productos y marcas delante del propio consumidor final. Las pasarelas ya son fenómenos de masas, siendo eventos profesionales son capaces de trasladar o comunicar lo que está pasando al consumidor final, sobrepasando las propias fronteras. En eso nos vamos a fijar.

P ¿Y tiene que ser en Madrid?¿No puede ser en Elche?

R La principal ventaja que tiene Madrid, frente a Elche, para ubicar allí la feria son las conexiones radiales con el resto de España, que facilita la visita al pequeño y mediano comprador, de tiendas multimarca. Hay que cambiar modelos, pero hay que contar con lo que se ha aprendido. Los pasos hay que darlos con mucha prudencia, y cambiarlo todo pocos empresarios lo harían.