Mejoras en las paradas de autobús, estaciones de bicicletas públicas, arreglo de las aceras y el asfaltado, espacios deportivos y, sobre todo, parques. Las peticiones de los ilicitanos en los presupuestos públicos señalan que uno de los principales intereses de la población es que la ciudad cuente en sus barrios con instalaciones para los más pequeñas. Y, como consecuencia de este interés, Elche ha estrenado recientemente tres parques más, alguno de nueva creación y otros remodelados: en la plaza Antoni Bru, en el jardín Mari Paz Hernández y en el jardín Marcelino Domingo Sanjuán.
Una de las particularidades de las nuevas zonas de recreo es que son inclusivas, están adaptadas para ser utilizadas por niños en silla de ruedas o invidentes. En concreto, en el parque del jardín Mari Paz Hernández, y para el caso de los menores invidentes, la instalación ofrece la posibilidad de realizar actividades de tipo táctil y cuenta con una serie de indicaciones en braille. Por su parte, para los menores en silla de ruedas hay un acceso en rampa con una pendiente suave y la anchura necesaria para poder girar una vez que se está en su interior.
El parque en la plaza de Antoni Bru, en pleno corazón de El Raval, supone una mejora para un barrio que no contaba con un espacio de este tipo para los más pequeños. La plaza ha sido remodelada, con una nueva ubicación para sus bancos y maceteros. «Hemos humanizado su entorno con más vegetación porque se encuentra encima de un aparcamiento», asegura el concejal de Participación, Felip Sànchez, sobre una zona de recreo de nueva creación en la que se ha instalado una pérgola sobre los juegos infantiles y en la que, para después del verano, está previsto que se coloquen nuevos elementos de sombra.
El suelo de los tres nuevos parques ya no es de losa, sino de caucho continuo, lo que permite que pueda haber juegos tradicionales pintados sobre él, como el tres en raya o la rayuela. Este tipo de pavimento es más duradero, requiere de menos mantenimiento y sufre pocas roturas. Las tres actuaciones surgidas de los presupuestos participativos tienen un coste total cercano a los 47.000 euros. Mientras que la de El Raval es de nueva creación, en el jardín de Mari Paz Hernández se ha ampliado a zona aledaña y en el de Marcelino Domingo Sanjuán se ha llevado a cabo una renovación completa del mobiliario.
Dentro de las actuaciones de este tipo, surgidas por las peticiones de la ciudadanía, se encuentran instalaciones deportivas, como la destinada a la práctica de la calistenia que se inauguró en la ladera del Vinalopó en enero y a la que cada tarde acuden jóvenes a realizar deporte. De estos presupuestos también han surgido parques para perros y nuevas estaciones de Bicielx. «Apostamos por la movilidad sostenible y la mejora del transporte urbano», añade un Sànchez que también anuncia que todas las marquesinas tendrán pantallas adaptadas a invidentes.
