Patricia Aguilar ya se encuentra en España y esta mañana sus familiares han dado una rueda de prensa en el Ayuntamiento de Elche para explicar las claves de este caso. De especial interés ha sido el relato de su padre, Alberto, quien ha estado los últimos meses en Perú para conseguir el regreso de su hija y la bebe que ha tenido con el líder de la secta, Félix Steven Manrique, que ha sido inscrito con los apellidos de la joven ilicitana. "Mi hija tenía claro que quería volver desde el momento en que me vio, y lo ha hecho por voluntad propia", ha apuntado un Alberto Aguilar sobrepasado por las emociones vividas durante los últimos tiempos y la acumulación de medios de comunicación de ámbito nacional esta mañana en el Ayuntamiento de Elche.
En la comparecencia también han estado presentes la prima y portavoz de la familia, Noelia Bru, y la abogada de SOS Desaparecidos, Maite Rojas. Ambas han solicitado "protección y respeto" por la intimidad de Patricia Aguilar hasta que la joven empiece a recuperarse de la pesadilla que ha vivido en Perú. También han pedido unas leyes más severas para acabar con este tipo de sectas y medidas concretas para terminar con el desamparo de las personas desaparecidas.
Alberto, el padre coraje de esta historia, ha acompañado a España a la muchacha de 19 añosha acompañado a España a la muchacha de 19 años y a su bebé. Él ha sido en Perú la persona que ha conducido a las autoridades hasta la choza en la cual se encontraba su hija cuidando de varios menores, además de su bebé, en unas condiciones deplorables y desnutridos.
Precisamente, el poder regresar a España con la pequeña, para lo cual era precisa la autorización del Gobierno peruano, ha sido el último escollo que debían salvar. No ha sido fácil pues han tardado un mes. En ello han contado con el respaldo callado del Ayuntamiento, donde nadie quiere hablar ni colgarse medallas en esta historia con final feliz. El diario sí confirmó que el alcalde, Carlos González, ha estado pendiente de este caso desde el primer día y ha mantenido numerosas conversaciones telefónicas con el padre desde hace meses, incluso cuando la Policía apartó de los expedientes a resolver esta desaparición por tratarse de un adulto. El Ayuntamiento de Elche ha colaborado estas últimas semanas para enviar documentación a través del departamento de Servicios Sociales a fin de obtener el plácet de las autoridades peruanas para la salida del bebé del país, lo que no era fácil, porque el caso sigue abierto.
