En unos días muy marcados por la inmigración y las fronteras en España, Mónica Carrillo se desmarcó anoche pidiendo a su ciudad, Elche, que sea «acogedora», un ejemplo de «tolerancia y mezcla de culturas que enriquecen». La periodista aprovechó el pregón que ofreció en la Plaça de Baix para reivindicar «un pueblo aún más gigante» y dar paso, de esta manera, a los días grandes de las fiestas patronales. Mientras pronunciaba estas palabras en el Ayuntamiento, con una mezcla de nerviosismo y emoción, recibió las muestras de cariño de un público que abarrotó la plaza y que se ha mostrado muy afectuoso con la periodista de Antena 3 desde que se conociera que tomaba el relevo de Diana Palazón como pregonera.

Junto al mensaje tolerante que emitió, Mónica Carrillo recordó que su origen familiar está en Murcia y que un día sus padres, Jesús y María, llegaron a Elche para «labrarse un futuro y dar a sus hijos las oportunidades que tuvieran a su alcance». La periodista, y también escritora, pronunció un discurso directo y con el gusto literario que ya ha mostrado en algunos de sus libros, como Olvidé decirte quiero o El tiempo todo locura, y apeló al cuidado del medio ambiente: «Tenemos que proteger las playas, las dunas, la flora y la fauna de nuestro entorno».

La comunicadora comenzó su pregón haciendo referencia al Elche CF y su ascenso, de hecho, se había barajado que el delantero Nino fuera el protagonista del discurso de este año, y expresó su deseo de que el próximo año el equipo franjiverde esté en el balcón del Ayuntamiento para celebrar su salto a la máxima categoría del fútbol español. Durante sus palabras, la ilicitana tuvo tiempo para recordar sus experiencias de adolescencia en las fiestas y también para poner la mirada en el porvenir: «Elche es la suma de todos y de todo lo que queremos ser. El futuro es nuestro y juntos haremos de ésta una ciudad aún mejor».

Los microcuentos de Mónica Carrillo, que tanto éxito tienen en las redes sociales, también estuvieron presentes durante el pregón. «Saben a sal y huelen a Mediterráneo. Si la morriña aprieta, hay que volver y cargarse de esta energía y volver a marchar para seguir volviendo», fueron algunas de las últimas palabras que pronunció la ilicitana ante el jolgorio de los asistentes y poco antes de que diera comienzo un espectáculo de luz, música y color en la Plaça de Baix.

Los representantes de los distintos entes festeros siguieron muy de cerca el discurso de la comunicadora, quien también se refirió a su compañero habitual en los informativos de Antena 3, el veterano periodista Matías Prats. «Os confieso que siempre le robo todas las noticias de Elche, incluso de Murcia, para contarlas yo», dijo una Mónica Carrillo que también reconoció que se enorgullece de hablar por donde va de su ciudad, sus dos patrimonios y sus fiestas.

Su paso por el colegio de Candalix o el instituto Montserrat Roig, unidos a recuerdos en el Parque Municipal o La Glorieta, y las referencias a las mujeres artesanas del calzado completaron un pregón reivindicativo y con el deseo por parte de una protagonista muy agradecida con sus paisanos de que Elche se convierta en «una ciudad de vanguardia, con una de las universidades más punteras del país y con un aeropuerto internacional».