El Ayuntamiento de Elche ha pedido a la consellera de Sanidad, Ana Barceló, en su primera visita oficial a la ciudad, que las actuaciones previstas para mejorar los consultorios de Torrellano y La Marina se extiendan a los de las pedanías de Las Bayas y Perleta. Así se lo trasladó ayer a la consellera el alcalde, Carlos González, que también pidió que se siga trabajando en el proyecto para lograr una segundo centro de salud en el barrio de Altabix.
Ana Barceló se comprometió a impulsar la construcción en Altabix después de reconocer que el centro actual está saturado. La titular de Sanidad avanzó que se está trabajando en el estudio de necesidades para el nuevo centro, y que el objetivo es que este trámite esté finalizado en poco tiempo para poder incluir el proyecto en los presupuestos de la Generalitat Valenciana.
En su primera visita como consellera a Elche Ana Barceló pasó por el centro de salud de El Raval y por el Hospital General de Elche, donde, destacó, «el Consell va a invertir más de diez millones de euros esta legislatura».
El alcalde de Elche, Carlos González aseguró ante la consellera que «la sanidad pública es una prioridad para la Generalitat Valenciana y para el Ayuntamiento de la ciudad», y que «a lo largo de este mandato hemos avanzado en proyectos fundamentales para la mejora de la calidad del servicio que se presta».
Para el Ayuntamiento ilicitano la Conselleria de Sanidad «se ha tomado en serio la principal reivindicación sanitaria de la ciudad, impulsar la remodelación integral del Hospital General, que avanza al ritmo establecido y que ya se visualiza en determinadas actuaciones».
Por su parte, la consellera manifestó que «este departamento de salud es prioritario y acabaremos invirtiendo esta legislatura cerca de 10 millones de euros, que se sitúa en un 287% por encima de la anterior legislatura del PP, lo que significa que hemos hecho intervenciones directas en centros de salud y en el hospital».
Por donde no pasó ayer la consellera de Sanidad fue por el Hospital del Vinalopó, el centro público de gestión privada. Este hospital gusta poco al Consell de Ximo Puig, y desde el mismo no han dejado de mostrar su pesar por la falta de interés de los representantes de la Generalitat Valenciana por conocer el trabajo que se realiza cada día.
