Una de las primeras frases que se escuchó de la nueva ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, que fue que los trasvases eran «algo extraordinario» sigue resonando entre los regantes del Tajo-Segura, que viven de él. Por ello no es de extrañar que ayer reunieran a su principal foro reivindicativo, al Círculo del Agua, para mandarle un mensaje a quien debe aprobar en los próximos dos meses (agosto y septiembre) sendos envíos de, al menos, 20 hectómetros cúbicos cada uno procedentes de los embalses de Entrepeñas y Buendía porque, de lo contrario, «sería una declaración de intenciones manifiesta» contra esta infraestructura, aseguró Lucas Jiménez.

Asociaciones y organizaciones agrarias y sociales del sureste español, al término de la reunión, no dudaron en reiterar el «resquemor» que aún les produce aquellas declaraciones de Ribera sobre la infraestructura, que obligaron al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, a intentar poner paños calientes. El encuentro del Círculo del Agua se produjo en un momento crítico porque los embalses de cabecera están en nivel 3, po lo que la decisión sobre si se trasvasa o no agua será «discrecional" por parte de la ministra. Algo que Lucas Jiménez, dijo, debería tener claro porque siempre se han enviado en esa franja (entre el nivel 3 y el 4) 20 hectómetros cúbicos desde que se aprobó la Ley del Memorándum. En estos momentos, hay 240 hectómetros cúbicos de «colchón» hasta ese límite que prohíbe los trasvases.

«No queremos ponernos la venda antes de la herida, solo comprobar que en el botiquín hay vendas por si acaso llega la herida», explicó el presidente, que añadió que ese nivel 3 en el cual se tiene que tomar la decisión, «dejará a las claras» las intenciones de Ribera hacia esta infraestructura, ya que es una franja en la que «siempre se ha trasvasado», reiteró anteriormente.

El presidente del Scrats remarcó que es «impensable» que no se vaya a decretar el trasvase los primeros días de agosto durante la reunión de la Comisión de Explotación, que luego debe refrendar Ribera mediante un decreto. «Que nadie piense en otra cosa que trasvasar 20 hectómetros cúbicos y que en septiembre siga con esos pensamientos». Jiménez admitió que el Círculo del Agua no tiene «ningún motivo real» para creer que no se va a desembalsar agua (pero) no trasvasar sería una declaración de intenciones filosófica manifiesta de lo que se quiere hacer en el futuro».

Por otra parte, el presidente del Círculo del Agua ha solicitado por carta a la ministra que les reciba en septiembre, cuyo objetivo es mostrarle que un sector «muy profesionalizado» como el agrario en el sureste «no puede vivir permanentemente en esta incertidumbre a corto, medio y largo plazo».