La Policía Nacional ha dado cuenta esta mañana de la detención de un atracador de 23 años, al que ha tardado cinco meses en lograr dar con su paradero después de que desvalijara un estanco en Elche. Los agentes acudieron el pasado mes de febrero a un estanco tras recibir una denuncia de un robo con intimidación a través de la Sala Operativa del 091.
"Tras acceder al estanco con la cara oculta y con un cuchillo en sus manos, el presunto autor de los hechos amenazó con clavárselo a dos clientas que se encontraban en el establecimiento si no atendían a sus demandas, pidiéndoles todo el dinero que llevaban encima", asegura la Comisaría de Elche en un comunicado.
Pese a la negativa inicial de las víctimas, el atracador, lejos de deponer su actitud, se abalanzó contra sus víctimas y tras golpearlas y caer éstas al suelo, les sustrajo de un fuerte tirón los bolsos que llevaban encima ocasionándoles lesiones por las que precisaron asistencia sanitaria.
Al lugar se desplazaron varias patrullas que recogieron las primeras declaraciones de testigos y perjudicados, si bien la escasa cantidad de datos identificativos que pudieron recabar, debido a que el autor iba perfectamente oculto con un pasamontañas, una braga y un gorro, hizo imposible su localización en ese momento.
Pese a las dificultades con las que se partía de inicio, la investigación fue asumida por los investigadores de la Comisaría de la Policía Nacional de Elche, quienes inmediatamente practicaron todo tipo de pesquisas policiales al objeto de esclarecer los hechos.
Las indagaciones dieron finalmente sus frutos al localizar a una persona cuya declaración fue clave para lograr la identificación del atracador.
Una vez identificado, los agentes dispusieron un operativo policial que culminó con su detención y posterior pase a disposición del Juzgado de Guardia de Elche.
