Una tercera parte del término municipal de Elche y un 15% de la población sin atender en condiciones por el servicio de limpieza y de recogida de basuras. Así se refirió ayer el Ayuntamiento al estado del actual contrata, vigente desde el año 2000 y sin estar adaptada a las necesidades de la ciudad después de dos décadas, tras llevar a sus espaldas incluso una prórroga.

El equipo de gobierno aludió ayer a estos argumentos para calificar de «obsoleto» el actual servicio y apuntar a que no reúne las expectativas de los ciudadanos. En concreto, la portavoz de Compromís, Mireia Mollà, cifró en un 30% el suelo urbano que está sin atender en condiciones, lo que ha obligado, según la edil de Relaciones Institucionales y de Turismo a «flexibilizar mucho el servicio» al tener una limpieza y una recogida de basuras pensada para menos población y menos superficie, lo que hace que la calidad disminuya.

Ante este panorama y el deterioro en el que coincidieron ayer desde PSOE y Compromís sobre el servicio de limpieza y de recogida de basuras, el Ayuntamiento está a las puertas de sacar a licitación una nueva contrata, que se adjudicará el próximo año y que tendrá una vigencia de una década. La apuesta será, precisamente, adaptar el servicio a la situación real del municipio y a las necesidades.

Ahora, la previsión del Ejecutivo local es que a finales de año puedan aprobarse los pliegos de condiciones para comenzar con todo el procedimiento burocrático y dejarlo todo atado antes de las elecciones municipales de mayo del año que viene.

Por el momento, lo que ya tiene cerrado el Consistorio ilicitano es el pliego de condiciones técnicas que este viernes aprobará en junta de gobierno local y, con el que, a partir de ahí, abrirá una consulta ciudadana para recoger las aportaciones de vecinos y de colectivos.

Precisamente, la pasada semana varios colectivos se unieron en una plataforma «Residuo Cero Elx» para hacer presión al Ayuntamiento, pedir más participación y pedir que replanteeen el futuro servicio. De cualquier manera, la idea del Ayuntamiento es que, después de haber iniciado ya una ronda de reuniones con asociaciones, expertos y grupos políticos, recabar a través de la dirección del correo electrónico (consultalimpieza@elche.es) opiniones hasta el 3 de septiembre. «Esta apuesta ya la recoge la nueva ley de contratos y se busca perfeccionar el pliego y propiciar la transparencia», explicó el alcalde, Carlos González.

En una cuestión similar incidió ayer el edil de Limpieza, Héctor Díez, quien defendió que el pliego de condiciones ha sido redactado por técnicos municipales, con lo que se busca «garantizar una objetividad».

Ahora,una vez recogidas las propuestas, el Ayuntamiento tendrá que cerrar el coste anual de la contrata, que será superior a los 220 millones de euros (ahora mismo el año está costando alrededor de los 22,5 millones) y que empezará a recogerse en los presupuestos del año 2020, según señalaron ayer desde el tripartito.

Principales líneas

Entre las medidas ya definidas para el nuevo contrato destaca la recuperación del barrido los siete días a la semana, el uso de agua regenerada para el baldeo, la mecanización de las tareas de limpieza o la limpieza integral de zonas verdes, eliminando la dualidad existente en la actualidad. El nuevo servicio de limpieza actuará de forma integral en las zonas verdes y parques.

Otra de las apuestas es la recogida integral de residuos municipales, incluidos los residuos domésticos e industriales no peligrosos. También habrá recogida de podas; aumentará la recogida selectiva de envases y papel cartón; se estudiará la instalación de contenedores soterrados en lugares con dificultades para ubicarlos en superficie; se renovarán los contenedores del campo; se introducirá desde el inicio del contrato del quinto contenedor (materia orgánica), se introducirá tecnología puntera, etc.