La falta de recursos hídricos ha impedido este año a los agricultores del parque agrario de Carrizales aumentar la producción de su melón, uno de los productos estrella del Camp d'Elx. Ante esta carencia, la pieza gourmet no podrá consolidarse en los mercados nacionales, principalmente el madrileño, y tendrá que conformarse con abastecer a la provincia de Alicante y otras regiones cercanas, como Murcia, Albacete y València. Ni mucho menos se plantea ahora dar el salto al mercado internacional, pese a que existen propuestas para ello, como aseguró ayer el presidente de la Comunidad de Regantes de Carrizales, Fernando Antón, durante el acto oficial del corte del melón en el parque agrario.

Para dar el salto fuera de las fronteras españolas, como hacen otros productos del Camp d'Elx, como la granada mollar, las brevas o los higos, los agricultores de Carrizales tienen una nueva esperanza a la que agarrarse: el plan de aprovechamiento hídrico dotado con 1.000 millones de euros que adelantó el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, durante el pasado mes de marzo. La propuesta del Consell tiene como líneas maestras la eficiencia en el consumo de agua, la modernización del regadío y la reutilización.

Esta cuestión fue ayer abordada por el secretario autonómico de Agricultura y Desarrollo Rural, Francisco Rodríguez Mulero, quien acompañó a los agricultores y a las autoridades locales en el primer corte del melón de Carrizales. «Nuestra intención es tener finalizado el plan de regadíos antes de que finalice el año, para lo que estamos contando con la colaboración de las universidades», apuntó Rodríguez Mulero. «En Carrizales se necesitan actuaciones, igual que en el resto del Camp d'Elx, en cuanto a conducciones, energías y un mejor uso del agua», añadió.

El secretario autonómico confirmó el respaldo de la Generalitat hacia el melón de Carrizales para que logre aumentar su producción y, de esta forma, regresar a los principales mercados nacionales y, posteriormente, conseguir dar el salto más allá de las fronteras españolas. «Aún así, tampoco es imprescindible exportarlo porque es un producto que tiene muy buena acogida a nivel local», apostilló Rodríguez Mulero en referencia a la producción de este año, que oscilará entre los 400.000 y los 500.000 kilos y que no tendrá problemas para ser colocada.

El pasado mes de marzo el presidente Puig anunció el plan de Modernización de Regadío, con el que se espera movilizar 1.000 millones en inversiones, tanto del sector público como del privado, durante las próximas dos décadas. Más a corto plazo, para los próximos cuatro años ya están previstas inversiones directas y subvenciones a las comunidades de regantes para su modernización, unas inversiones que llegarán a los 150 millones de euros, de los que 60 se repartirán por las comarcas de la provincia de Alicante.

De esta inyección económica espera beneficiarse Carrizales para expandir su principal producto, aunque aún queda mucho camino por recorrer, como reconoció ayer Antón: «Vamos a continuar buscando apoyos porque lo que tenemos que hacer es visibilizarnos más».