El sector del calzado se va a beneficiar, a partir del 1 de julio, de una reducción de los aranceles de importación chinos, que aplicarán una reducción que en alguno casos llegará al 60%. Una rebaja en los costes de comercialización a los que tienen que hacer frente las empresas que llevan su producto a China y que obedece, según indicaron desde la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE), a la decisión del gobierno del gigante asiático de abrir su mercado de consumo e impulsar su modernización y competitividad.
Concretamente, el gobierno chino ha anunciado recientemente que reducirá los aranceles de importación de alrededor de 1.500 productos de consumo diario. En este sentido, artículos como el calzado, apuntaron desde la patronal española, «pasarán de soportar un gravamen en aduanas del 16% a tener un impuesto de menos de la mitad, en torno al 6,9%». Esta reducción de aranceles también va a afectar a productos como la ropa, los sombreros, el menaje de cocina o artículos deportivos.
Con esta medida, el gobierno de Li Kequiang pretende facilitar la apertura del mercado de consumo en China, y se trata de una decisión que está relacionada con la distensión comercial entre China y Estados Unidos. Concretamente, recordaron desde FICE, «ambos gigantes económicos acordaron terminar con el enfrentamiento comercial vivido en los últimos meses y negociaron la puesta en marcha de un acuerdo para reducir el déficit estadounidense respecto a China.
En la actualidad el arancel medio sobre ciertos productos de las naciones más favorecidas por esta decisión está fijado en el 15,7%, y con la reducción pasará al 6,9%. Lo que equivale, destacaron desde FICE, «a un recorte de alrededor del 60%».
No obstante, el arancel final varia en función del tipo de producto. En lo que se refiere al calzado con suela y parte superior de caucho o plástico baja hasta el 10%. En el caso de las botas de ski o snow se queda en el 4%. Las piezas para fabricación de calzado, de plástico, goma o madera bajan considerablemente, del 15% al 6%, y la mayoría de los productos de cuero encontrarán a partir de julio aranceles por debajo del 10%.
En la actualidad China está a las puertas de pasar a formar parte de los diez mercados internacionales prioritarios para el sector zapatero español. Atendiendo al informe de comercio exterior elaborado por la Federación de Industrias del Calzado Español en 2017, China fue el undécimo país donde las firmas españolas exportaron más calzado, y el primero en Asia.
Concretamente, a China se vendieron el pasado año 1,2 millones de pares de zapatos, valorados en 48,2 millones de euros. Esto significó un aumento del 9,2% en volumen, mientras que en términos de valor el incremento fue del 6,46%.
Demanda de calidad
Llama la atención que el precio medio del calzado que se vendió a China durante el año pasado fue de 39,7 euros, lo que lo sitúa entre los tres destinos donde se consume el producto español de mayor calidad y precio. En este ranking el calzado que se vende a China sólo está adelantado, en cuanto a precio se refiere, por el que consumen en Estados Unidos, donde el precio medio es de 46,6 euros, y el de Hong Kong, que ocupa el primer puesto con un valor medio de 57,45 euros el par.
Por este motivo, el mercado china se está convirtiendo durante los últimos años en un destino interesante para el producto de calidad que se produce en las empresas de la provincia.
