Todos reconocen que es totalmente legítimo que se cree un partido político, aunque en este caso sea con la meta de conseguir la independencia de la pedanía de El Altet frente a Elche, pero ni hablar de «arrancar un pedazo» al municipio ilicitano. Prácticamente, tanto los tres grupos municipales que forman parte del Gobierno local, como los tres en la oposición coinciden con estas sensaciones tras conocerse que desde la mencionada partida, además del movimiento segregacionista, se quiere crear ahora una fuerza política propia.

El matiz estaría en que las tres fuerzas de la oposición culpan en parte al actual tripartito (PSOE, Compromís y Partido de Elche) de este nacimiento por su «ausencia de interés por esta y otras partidas» (Ciudadanos), la «falta de presencia de las instituciones más allá de la ciudad» (PP) y «para defender sus intereses, ya que los que hay actualmente no lo hacen» (Ilicitanos por Elche).

Por su parte, el grupo municipal socialista, al igual que el resto de partidos, respeta que se sume una nueva fuerza, pero defiende que desde el equipo de gobierno sí se han acercado servicios sanitarios, educativos y mejorado las propias comunicaciones con las pedanías, además de acometer inversiones. En este sentido, desde el tripartito se recuerda, por ejemplo, que la próxima semana comienzan las obras del skatepark tras las mejoras en rotondas, asfaltado, o señalización vertical en El Altet.