La Policía Nacional de Elche ha detenido a una mujer que regentaba una nave de calzado en el polígono de Carrús por un delito contra los derechos de los trabajadores, ya que tenía hasta a 14 empleados en su empresa sin dar de alta en la Seguridad Social.

La investigación se inició tras un informe desfavorable de la Inspección de Trabajo realizado a finales del año 2017. Ese informe, de hecho, alertaba de ese posible delito contra los trabajadores, tras visitar las instalaciones y comprobar que el personal estaba sin contrato.

La Brigada de Extranjería y Fronteras de la Comisaría de la Policía Nacional de Elche inició entonces una exhaustiva investigación para esclarecer si se trataba de una práctica habitual en la mercantil y determinar el número exacto de trabajadores que se encontraban en esa situación. Los investigadores también realizaron las pesquisas pertinentes sobre la supuesta situación fraudulenta de la empresa con sus trabajadores y, así, poder averiguar cuál era su situación administrativa.

Tras semanas de investigación, los agentes lograron recabar datos suficientes como para poder acusar a la mujer que estaba al frente de la nave de un delito contra los trabajadores. Y es que, tras el informe de la Inspección de Trabajo, los agentes se personaron en la nave a diferentes horas, encontrando en el local a las 14 personas en «situación capciosa», según apuntaron desde la propia Comisaría de la Policía Nacional de la localidad.

La excusa que se les dio entonces fue que estos empleados estaban en periodo de prueba, y, por eso, no se les había dado de alta en la Seguridad Social. Los investigadores constataron que éste era el modus operandi habitual en la empresa: utilizar ese supuesto periodo de prueba para tener a los empleados sin dar de alta, con el fin de ahorrarse los costes de la Seguridad Social.

Tras la detención, la acusada pasó a disposición judicial, y ha quedado a la espera de juicio por ese delito contra los derechos de los trabajadores. Este caso evidencia, una vez más, la problemática de la economía sumergida en la ciudad, y, en especial, en lo que respecta al sector del calzado. Así, las denuncias a la Inspección de Trabajo u otras iniciativas, como el portal de denuncias anónimas de los sindicatos, contribuyen a regularizar la situación de los trabajadores.