?«Cualquier empresa puede fabricar un zapato, pero, al final, el consumidor busca algo más», apuntan desde el sector zapatero. Rubén Carbonell, responsable de Branding de Wonders, admite abiertamente que, «si no hubiésemos apostado por nuestra propia marca hace veinte años, no estaríamos vivos».

Rubén Carbonell explica que, «al principio, buscábamos un entorno en el que estar, que era el territorio nacional, pero, cuando quisimos salir al exterior, tuvimos que invertir en la marca, porque sin ella es prácticamente imposible hacerse un hueco».

En una empresa como Wonders, el departamento de branding tiene, al menos, cuatro personas, y aseguran que contar con una marca propia les permite tener un mayor control en los procesos de diseño, confección y comercialización del producto. «Es la única manera de tener un control absoluto sobre el producto y hacerlo llegar al mercado con una identidad», sostienen desde la empresa ilicitana.