n El retraso a la hora de juzgar los casos puede ocasionar aún más dificultades en el procedimiento judicial. Y es que, cuando se va a localizar a las partes implicadas en el proceso, se da con relativa frecuencia el hecho de que, con el paso de los años, los datos de los que dispone el tribunal para citar a las partes no se corresponden con la realidad. Cambios de domicilio, a veces incluso en otro país, domicilio incorrecto o hasta la defunción de alguna víctima o acusado hace que los funcionarios tengan que emplear mucho más tiempo del ordinario en llevar a cabo las citaciones. Al final, es la pescadilla que se muerde la cola. Se trata de aumentar el número de señalamientos, pero los funcionarios lo tienen difícil a la hora de citar a las partes, lo que retrasa aún más el proceso.

Esto es especialmente llamativo en casos que afectan a la Vega Baja, con una gran población extranjera. En los últimos años muchos han vuelto a sus países de origen o han cambiado su lugar de residencia, por lo que el proceso se complica.

La falta de funcionarios para realizar todo el trabajo asociado al funcionamiento del tribunal es otra de las causas que impide acelerar el número de causas que llegan a juicio. Por tanto, el personal también pide ese desdoble de la Audiencia en Elche, para poder dar salida a más expediente y acelerar el trabajo de las diferentes salas judiciales.