? Esta red de empresas repartidas por hasta 10 ciudades españolas tenía el mismo modus operandi: a través de empresas instaladas en España adquiría bienes a mercantiles europeas, de las que se deducía el IVA. Otra empresa B adquiría ese bien en España, y como compradora, se deducía el IVA. Después, la firma que había adquirido inicialmente la mercancía desaparecía sin declarar los impuestos correspondientes. Además, se habría desviado dinero a paraísos fiscales, por lo que también se acusa a los implicados de blanqueo.