Las vías de la Alta Velocidad se preparan para la actividad en Elche. El Ministerio de Fomento ha activado la maquinaria para poner a prueba la infraestructura antes de que pueda entrar en funcionamiento la línea Madrid-Elche-Murcia a su paso por el municipio ilicitano. El compromiso del Gobierno de Rajoy era que el AVE pudiera comenzar a rodar esta primavera. Algo que ahora está en el aire y depende cómo marchen las comprobaciones sobre el terreno.

Después de haber superado ya las pruebas de carga en las vías, Adif también ha realizado ya otro tipo de controles para medir la seguridad en la zona, como la verificación del enclavamiento y su validación con el tren laboratorio. Asimismo, también han comenzado las pruebas de concordancia de los elementos de campo, que se prolongarán al menos a lo largo de este mes, en función de los resultados que se desprendan de ellas, tal y como señalaron desde Adif.

Según la hoja de ruta que maneja el Ministerio de Fomento, a finales de marzo, está previsto que circule una auscultadora con sensor láser para comprobar la geometría de vía. Se trata de un vehículo específico para realizar mediciones mediante elementos manuales y de topografía clásica. Tras recabar toda esa información y analizarla, según apuntaron desde Adif, se planificarán las siguientes pruebas. Con todo ello, una vez comenzados los ensayos sobre la infraestructura y haber finalizado ya prácticamente las obras en la estación y en los accesos, la siguiente incógnita que queda por resolver es cuándo llegará la Alta Velocidad hasta Elche.

Para ello, una vez completadas todas estas comprobaciones es la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria (AESF) quien tendrá que determinar su validez y, por tanto, emitir la autorización de puesta en servicio de la línea.

Precisamente, la falta de plazos concretos ha sido en los últimos años la tónica general que ha empañado el proyecto de la Alta Velocidad a su paso por Elche. Una infraestructura, cuando menos, cuestionada, que se adjudicó en noviembre del año 2014 por un importe menor de lo anunciado, 6,5 millones, y que tenía que haber estado terminada en apenas diez meses.

De cualquier manera, ahora sí que sí parecen haber entrado en la recta final las obras de esta infraestructura con el arranque de las pruebas sobre el terreno y con la finalización de la glorieta que da acceso al apeadero de Matola. La urbanización exterior de la estación y el aparcamiento han sido la última de las tareas que han concluido los operarios.

En el edificio de viajeros también se ha trabajado en los últimos meses para dejar listos detalles como la instalación de puertas automáticas, la zona de venta de billetes y la instalación de los ascensores, entre otras tareas. En los andenes, ya están completadas las marquesinas, los elementos de borde de andén, así como el cableado de las instalaciones.

De este modo, las vías y los andenes de la infraestructura se han convertido ahora mismo en el escenario principal de los trabajos, lo que ha comenzado a generar expectación por los años de retraso que acumula la obra. No obstante, no solo conocer la fecha de la entrada en funcionamiento del AVE en Elche ha centrado las reivindicaciones del Ayuntamiento en los últimos meses. La conexión ferroviaria de la línea de cercanías Alicante-Elche-Murcia con la estación del AVE-Matola así como el enlace con el aeropuerto de Alicante-Elche son las necesidades que ha trasladado la Corporación municipal al Gobierno de Rajoy, entre otras necesidades en infraestructuras para la ciudad.