La Oficina de Atención a las Víctimas del Delito atendió el pasado año a más de 500 personas en la Ciudad de la Justicia de Elche. Una cifra que convierte a este organismo, por volumen y servicios ofrecidos, en una unidad a la par que las oficinas de capital de provincia, como señalaron desde la Conselleria de Justicia.

Hasta ahora, este gran volumen de consultas lo asumía la letrada, que, a su vez, prestaba este apoyo psicológico a las víctimas. «Aquí todo lo que tratamos son dramas. La gente que recurre a nosotros viene con un gran conflicto emocional detrás», cuenta la letrada. Esto hace que «yo no sea una abogada convencional. Este trabajo es muy vocacional y aquí no vale con ofrecer apoyo jurídico, despachar y dar paso al siguiente», señala en este sentido. Por tanto, uno de los secretos del éxito de esta oficina es «atender sin reloj, llegar hasta el fondo del asunto y que la víctima confíe en lo que hacemos para poder ofrecerle la mejor atención posible», añade. Ese vínculo emocional podrá reforzarse ahora aún más con estas dos nuevas incorporaciones. El fin es que la psicóloga y la trabajadora social ahonden aún más en los problemas que llevan a los usuarios y las usuarias a pedir ayuda al sentirse víctimas de un delito.

El refuerzo del servicio comenzó a principios de mes, tras unas semanas de formación del personal, y ya se encuentra operativo en la Ciudad de la Justicia de Elche.