? Durante el juicio de ayer también declararon los policías que detuvieron al presunto asesino en un punto caliente de compraventa de droga en Murcia, en la mañana del 7 de agosto de 2014, cinco días después de cometerse el crimen. Los agentes señalaron que encontraron al detenido en perfectas condiciones, rechazando la hipótesis de que fuera drogado, y que confesó el crimen justificándolo con que la había matado porque el presunto autor del crimen «llevaba muerto un año», aludiendo a una supuesta infidelidad. La acusación, lógicamente, mantiene que ni los celos ni las supuestas infidelidades pueden ser eximente alguno, mientras la defensa pretende justificar la rebaja de la pena por no tener al 100% sus capacidades mentales, por un brote psicótico motivado por los celos y el consumo de drogas, algo que, tal y como señala la defensa, no son justificación.