El Ayuntamiento de Elche justificó ayer la sustitución de un semáforo en el cruce de Pedro Juan Perpiñán con Baltasar Tristany debido a que el elemento de regulación del tráfico había quedado inclinado, con riesgo de caída «por algún tipo de golpe». Desde el equipo de gobierno se justificaba así el desperfecto en la infraestructura, pese a que desde el Parque Comarcal de Bomberos de Elche atribuyeron a la corrosión causada por el orín de canes y al desgaste estos desperfectos. Sin embargo, desde el Ayuntamiento negaron que la incidencia del orín de perros «sea especialmente significativa», si bien no aclararon qué tipo de golpe pudo provocar que un semáforo se incline en su base y provocara riesgo de caída. La empresa de mantenimiento retiró la infraestructura. Las mismas fuentes municipales señalan que el año pasado se sustituyeron 16 semáforos por la corrosión de orines y también de lluvia y viento.