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Y el acceso a la sanidad

Británicos en la provincia confían en conservar sus pensiones tras el Brexit

El embajador del Reino Unido en España se reúne con decenas de compatriotas en el campus de Elche para despejar dudas sobre el proceso

Británicos en la provincia confían en conservar sus pensiones tras el Brexit

¿Habrá alguna restricción en el movimiento de las finanzas personales tras el Brexit? ¿Se va a llegar a algún acuerdo para que los expatriados puedan viajar libremente por Europa? ¿Recibirán tarjetas de identificación cuando el Reino Unido abandone la UE? ¿Las pensiones estatales seguirán siendo transferidas gratuitamente? Éstas y otras muchas preguntas aguardaban ayer al embajador de Reino Unido en España, Simon Manley, en un encuentro con británicos en la Universidad de Elche, organizado por el Observatorio Provincial de la Inmigración de Alicante ante la inquietud generada por la desconexión de Inglaterra, Irlanda del Norte, Escocia y Gales de la Unión Europea, votada en este sentido el pasado 23 de junio de 2016.

Manley vino sobre todo a lanzar un mensaje de tranquilidad y optimismo, no solo para los británicos residentes en la provincia y en España (algunos de los presentes llegaron de fuera de Alicante), sino también para los españoles que ahora mismo están en tierras anglosajonas.

«Estamos trabajando para asegurar a los británicos que residen aquí que puedan seguir haciéndolo en los años venideros. Estamos muy cerca de un acuerdo con la Unión Europea sobre los derechos de los ciudadanos, sean británicos que viven aquí, o sean valencianos, españoles que viven en Reino Unido», señalaba el diplomático en declaraciones a la radio y televisión de la UMH, el cual estuvo presente en compañía, entre otros, de Sarah Jane Morris, cónsul británica en Alicante.

Más de 64.000 expatriados

Más de 64.000 británicos, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), viven en la provincia, y una gran mayoría siente incertidumbre por lo que le pueda pasar.

«Tienen miedo con su pensión, con la asistencia sanitaria en España y su nacionalidad. Están preocupados», explica Alfonso Ortega Giménez, director del mencionado observatorio y profesor de Derecho Internacional Privado. «Mi impresión personal es que al final se va a quedar en un Brexit muy light», añade el docente, quien insiste en que la cuestión de las libertades y la economía es lo que más dudas está generando.

«El pueblo británico votó a favor de la salida de la Unión Europea, no de la salida de Europa. Somos un país europeo, con los mismos vecinos y valores europeos aliados de siempre. Tenemos que trabajar juntos contra la amenaza del terrorismo, el cambio climático y tenemos que lograr un acuerdo entre la UE y Reino Unido que facilite el libre comercio entre nuestras empresas y países, y lograr un entendimiento que permita una relación estrecha y positiva entre ambas partes», remarca Manley, quien desde un primer momento se abrió a las preguntas de los presentes, más de medio millar de británicos que participaron en la jornada en el campus que llevaba por título «Brexit: consecuencias jurídicas prácticas».

Richard Hill, representante de la asociación Brexpats in Spain Alicante, en contra de la salida de la UE, y uno de los promotores también de este encuentro, junto a la Facultad de Ciencias Sociales y Jurídicas de la Universidad Miguel Hernández y el despacho de abogados Pellicer-Heredia, resalta por su parte el hecho de que se haya entrado en una segunda fase de las negociaciones. En este sentido, ayer se daba a conocer que la premier británica, Theresa May, estaba dispuesta a pagar 45.000 millones de euros a la UE por esa desconexión, todo ello de cara a una nueva ronda de negociaciones con Bruselas prevista para diciembre.

Hill indicaba que el encuentro con el embajador tenía como objetivo conocer las consecuencias jurídicas y prácticas para empresas y particulares, y no solo de cara a los británicos, sino también pensando en los españoles en la isla.

Protección

En opinión del portavoz de Brexpats, «el Brexit preocupa a muchos expatriados y queremos que se nos proteja. Esa protección debería venir tanto del Parlamento europeo como desde el Parlamento británico».

«El resultado no tiene por qué ser una catástrofe ni ocasionar un problema irreversible respecto a las relaciones entre ambos. Ni van a quedar desamparadas las inversiones bidireccionales, ni tampoco van a estarlo los residentes británicos en España o los españoles que viven en Gran Bretaña», aseguran desde la organización de esta jornada y en la cual también se daba por descontado que se va a respetar la protección de las inversiones ya que expertos consideran que no tienen por qué paralizarse.

Por su parte, el embajador asegura que estaban muy orgullosos «de la presencia de tantos españoles en nuestra sociedad, sean estudiantes, investigadores o trabajadores», para insistir en que «queremos trabajar con nuestros socios europeos para garantizar los derechos de los españoles y otros europeos que viven en nuestra sociedad para que puedan quedarse sin ningún problema».

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