Los casos de enfermedad alérgica en la población española,y por extensión, en Elche, cada día son más frecuentes. En concreto, la alergia a los medicamentos se convierte en la tercera causa de consulta en los departamentos de Alergología en los hospitales ilicitanos y ha registrado un repunte del 3% según el informe Alergológica 2015, un estudio de prevalencia a nivel nacional. El mayor consumo de fármacos es el principal motivo del crecimiento de estas dolencias. En este caso, según apunta la especialista en Alergología del Hospital del Vinalopó, Mónica Antón, las alergias en medicamentos son más frecuentes hacia los antiinflamatorios comunes (aines) y también a los antibióticos de penicilinas. De los aines, el ibuprofeno y el metamizol son los causantes más comunes y de los antibióticos, las penicilinas. En los últimos años también aumentado la frecuencia de alergia a quinolonas.

El uso frecuente de estos medicamentos comunes es la principal causa del desarrollo de estas alergias que se dan, sobre todo, entre la población adulta. Desde el Hospital General de Elche, la facultativa especialista en Alergia, Isabel Flores, asegura que, si bien no se recopilan datos en concreto sobre la prevalencia de estas alergias a los medicamentos, la sensación clínica derivada de su experiencia y bagaje trabajando en el departamento sí que le permite afimar que hay cada vez hay un registro más grande de pacientes derivados a su área desde atención primaria, sobre todo en paciente adultos.

Los síntomas más frecuentes que presentan las personas que desarrollan este tipo de dolencias son urticaria, asma, y el angioedema o hinchazón en las mucosas.

La contraindicación de estos tipos de alergia que, en muchos casos, vienen derivadas de un uso frecuente de estos medicamentos, es que una vez diagnosticado el trastorno «hay que prohibir a los pacientes que tomen ese tipo de medicamentos y entonces quedan menos recursos fármacos a los que optar, como podrían ser la codeína o el paracetamol», apunta la alergóloga Flores, quien además puntualiza que «si se sospecha de una reacción alérgica a un medicamento, en ningún caso debemos volver a tomarlo para confirmarlo, puesto que la reacción puede ser mucho más intensa e incluso crear un shock anafiláctico que podría llegar a ocasionar la muerte», asevera la doctora del Hospital General.

La tendencia, según los datos estadísticos, es que este tipo de alergias vaya en aumento por la mayor ingesta, a su vez, de fármacos entre la población.

En todo caso, cualquier fármaco puede ser una potencial causa de alergia: diversos tipos de antibióticos, anestésicos, antiepilépticos, o los mismos corticoides, que paradójicamente, se usan para el tratamiento de reacciones alérgicas. Además, según el informe Alergológica 2015, los pacientes con alergia a los medicamentos son los que peor puntuación sacan, con respecto a otros tipos de dolencias, en calidad de vida física. No obstante, desde los centros sanitarios no quieren hacer saltar ninguna alarma y, en cualquier caso, desaconsejan la automedicación o el uso excesivo de medicamentos comunes para tratar de evitar el desarrollo de estas alergias en adultos.

Al alza

Por otra parte, la alergia a alimentos actualmente se encuentra en auge y sobre todo la alergia a frutas rosáceas (manzana, melocotón y uva) y a los frutos secos. Respecto a estos productos, el aumento ha sido de un 7% en 2005 hasta un 11,4% en 2015. El incremento de alérgicos a estos alimentos es objeto de estudio actualmente por el servicio de Alergología del Hospital del Vinalopó.