Los avances tecnológicos que llegan a las fábricas antes pasan por los laboratorios. Los investigadores de la Universidad Miguel Hernández trabajan en el campus sus proyectos y después los envían a los laboratorios que financia la Unión Europea en Bilbao, y que están en la empresa Grupo Innovalia. Es allí donde se ponen a pruebas los procesamientos a través de herramientas digitales.
El objetivo de los laboratorios de este tipo es ayudar a las pequeñas y medianas empresas a encontrar soluciones a sus necesidades. Por ello, apuntaron los expertos, es importante que las firmas trasladen sus necesidades con el fin de adaptar los procesos con el apoyo que presta la Unión Europea.
Las empresas, puntualizó el experto Óscar Lázaro, necesitan trabajar en colaboración con universidades, como la UMH, y con los proveedores de tecnología, para que todos los actores implicados trabajen en la misma dirección.
