Una parte importante de la producción de aceite que se obtiene con las olivas que se cosechan en el Camp d'Elx y el resto de la comarca del Baix Vinalopó se destina al mercado local, o se la quedan los propios agricultores para consumo propio. Pero aún así sigue quedando mucho que se reparte entre el mercado nacional y la demanda, cada vez más creciente, que se registra a nivel internacional.

Países de la Unión Europea como Francia, Bélgica, Alemania y Holanda son consumidores de aceite de oliva, pero también países como Estados Unidos, Israel o Japón.

Entre los últimos acuerdos comerciales a los que han llegado las almazaras de Elche para enviar aceite al extranjero destaca el firmado con Taiwán, donde el mismo gobierno la lanzado una campaña pública que informa de que el aceite de oliva es uno de los más beneficiosos para el consumo humano.