La presión de los vecinos de La Marina ha llevado al Ayuntamiento de Elche y al Consell a ceder para celebrar una reunión de trabajo conjunta con los afectados por el Plan de Protección del Litoral (Pativel). Las dos administraciones han aceptado la petición formulada por el Síndic de Greuges ante las quejas formuladas por residentes de la pedanía costera.

La reunión se celebrará mañana en las oficinas de Alicante de la Conselleria, pero irá encaminada únicamente a mejorar el nivel de información y asesoramiento sobre el Pativel. La intervención del Síndic en este asunto vino motivada por la queja que presentaron ante esta institución representantes de La Marina y de la Asociación de Vecinos Pinomar de Elche. Ambos denunciaban la falta de información y de participación durante la tramitación del plan. Frente a ello, el tripartito ha defendido haberse reunido en varias ocasiones con los vecinos.

El conflicto se ha generado en el sector MR-10, la zona de la pedanía en la que se ha reducido al máximo la edificabilidad. Una franja para la que el Consell ha decidido proteger con el nivel más alto este espacio y permitir tan solo 300 viviendas, cuando el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) permitía unas 1.800. Sin embargo, en otras zonas de la partida costera todavía quedan 1,1 millones de metros cuadrados de suelo por desarrollarse urbanísticamente.