El juzgado de violencia de género de la Ciudad de la Justicia de Elche registra cada fin de semana una decena de denuncias, lo que supone un considerable aumento con respecto al resto de la semana. En su mayoría se trata de quebrantamientos de condenas anteriores, principalmente en cuanto a órdenes de alejamiento o prohibición de comunicación se refiere. Las causas son muy diversas, pero según señalan desde los juzgados ilicitanos el mayor tiempo libre durante los sábados y los domingos, el aumento en el tiempo de ocio y pasar más tiempo en pareja hace que los maltratadores reincidan en su conducta.

El dato también es llamativo cuando hay días festivos. El pasado día de la Comunidad Valenciana o tras el día de la Hispanidad, la media de casos que se registraron en el juzgado de Elche también subió, como si de un fin de semana se tratara.

Ante estos hechos, desde la Ciudad de la Justicia lo tienen claro: denunciar siempre. Y es que si bien es cierto que la mayoría de denuncias en estos días son de las menor gravedad, el hecho de acosar, ponerse en contacto con la víctima cuando se le ha prohibido e incluso amenazarla través de mensajes de móvil, no deben dejarse pasar. «Así empiezan muchos de los casos que después traen consecuencias mucho peores», señalan fuentes policiales- Por tanto, es necesario ponerle fin a estas conductas desde el primer momento.

El mayor consumo de alcohol en los fines de semana y festivos también está detrás de este aumento de casos. «No es que sea una justificación, porque nada puede alegarse para defender estas conductas, pero sí es cierto que, muchas veces, se pierde el control. Algo que, por supuesto, sigue siendo responsabilidad única del infractor», señalan fuentes judiciales.

Por último, resaltan que, si bien la mayoría de casos son insultos, amenazas y acosos, y no violencia física, esta sigue estando muy presente y, en todos los casos, haya agresión o no, se trata de maltrato y de violencia machista, por lo que los hechos deben ser denunciados. En el primer trimestre de 2017, los juzgados ilicitanos registraron 456 denuncias.