Las campanas de la Basílica de Santa María comenzaron a sonar a las 20 horas de ayer para anunciar el inicio de la ceremonia de la toma de posesión canónica del nuevo párroco y rector del tempo, Ángel Bonavía. La eucaristía estuvo presidida por el obispo de la Diócesis Orihuela.Alicante, Jesús Murgui, y reunió a decenas de fieles en una basílica llena hasta la bandera para recibir al párroco.

Natural de Aspe, Bonavía prometió fidelidad a los valores católicos en su nueva etapa al frente del espacio eclesiástico más icónico de la ciudad. La misa estuvo amenizada por la Escolanía del Misteri y el coro parroquial.

Al acto asistieron representantes de diferentes entidades religiosas, como el propio patronato del Misteri d'Elx, presidentes de cofradías y hermandades de la ciudad, o algunos representantes de la Corporación ilicitana.

Bonavía se reencontró así con los fieles ilicitanos, pues ya estuvo designado durante seis años en la ciudad, en la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús. Además, también fue vicario de zona, por lo que conoce bien a la comunidad eclesiástica ilicitana. El párroco se ha declarado seguidor de la apertura de la Iglesia iniciada por el Papa Francisco, y se muestra optimista con respecto a la crisis de fe, pues asegura que está mejor que en otras épocas.