Otro pulso, a priori, ganado a Mercedes Alonso y, con ello, nuevos tiempos en el seno del Partido Popular ilicitano. Su actual presidente Pablo Ruz sacó anoche músculo en la sede de Marqués de Asprillas y logró el respaldo de una amplia mayoría del comité ejecutivo del PP para arrebatar la portavocía del grupo municipal a la exalcaldesa. Algo que era cuanto menos de esperar tras arrasar en los comicios internos del partido, celebrados en junio.

En julio, ganó por goleada a su mentora con 870 votos, frente a los 420. Y la reestructuración del grupo municipal era una realidad que muchos círculos esperaban que llegara de cara al arranque del nuevo curso político en la ciudad. Con el respaldo de ayer, los de Ruz dan un paso adelante firme, pero no definitivo todavía, ya que, tal y como marca el guión, los concejales son los que deben dar su visto bueno y firmar el acuerdo. Después, es el alcalde, Carlos González, es el que finalmente tiene que ratificarlo en el pleno. Todo apunta a que será en el pleno de este mes de septiembre. Eso sí, si no ocurren imprevistos de última hora. Sea como sea, el comité de dirección del PP puso anoche sobre la mesa la propuesta de colocar a Pablo Ruz como rostro visible en el principal partido de la oposición, cargo hasta ahora ocupado por Mercedes Alonso. La exalcaldesa cuenta, por el momento, con uno de los suyos como adjunto: Vicente Granero. Ruz ejercía como segundo.

Sin embargo, si los planes del delfín del PP al final salen adelante esto supondrá una recolocación del puzzle. Un cambio de fichas que se traduciría en algo más que la elección de los portavoces adjuntos. Si el presidente local logra ser ratificado también sería factible que con ello llegara la renovación del asesor de confianza que tiene el PP.

La otra consecuencia llegaría con el cambio de dedicaciones exclusivas que también tendrán que ser replanteadas en el grupo municipal. Asunto también cuanto menos polémico. Ahora mismo los tres leales a Alonso son los que tienen dedicaciones. Vicente Granero dispone de una, Justino Delgado de media y Erica Sánchez de otra media.

Precisamente, este tema tensaba las cuerdas a pocos días de celebrarse la asamblea local del PP para elegir presidente. Otra zanja abierta que evidenciaba la ruptura en el seno del partido. Mercedes Alonso, todavía portavoz, daba a Justino Delgado el medio sueldo que dejaba Erica Sánchez para poder compatibilizar su labor en el Ayuntamiento con otras actividades deportivas. Los afines a Pablo Ruz querían que fuera para Loli Serna. Pero no pudo ser. Ahora, habrá que ver cómo acaba el grupo municipal en este mandato que ya ha atravesado su ecuador. Y también habrá que ver cómo queda el rompecabezas de cara a la carrera de 2019, con las elecciones municipales cada vez más cerca.