Los pacientes que piden cita a través de internet para su médico de familia en los centros de salud que dependen del área del Vinalopó acumulan hasta dos semanas de retraso. Una situación que contrasta con las menos de 24 horas que deben esperar los usuarios de San Fermín o El Raval, que disponen de cita al día siguiente. El de mayor colapso es el centro de salud del Doctor Sapena. Según apunta uno de sus usuarios, y como ha podido comprobar este diario, el paciente que pidiera cita a través de la web de Conselleria la obtenía para el 1 de septiembre, más de dos semanas después. En el caso de El Toscar o el Pla-Vinalopó, la espera llega hasta el 24 de agosto.
Desde el Hospital del Vinalopó señalaron ayer que la demora se deba a que las agendas de los médicos se ven modificadas para poder cubrir vacaciones. Cuando se pide cita por internet, la están ofreciendo con cierta demora aunque no es un dato real puesto que las citas para ese doctor se reparten entre los demás médicos». Un problema que no sufren los pacientes del Hospital General, tal y como ha podido comprobar este diario. Por tanto, el Vinalopó recomienda pedir la cita por teléfono o de forma presencial, y defendieron que «todos nuestros centros de salud cuentan con esperas razonables dentro de los límites establecidos». Una práctica, la de pedir cita telefónica o presencial, que precisamente tratan de reducir los centros de salud, como prueba la aplicación móvil que lanzó hace unos meses la Generalitat para facilitar aún más el trámite telemático y reducir las colas en las instalaciones.
Por tanto, muchos pacientes optan por acudir al médico por la tarde, aprovechando que los centros de salud del área del Vinalopó abren por las tardes durante el verano, en contra de los del General.
Las esperas despiertan las críticas de los pacientes, más aún cuando comprueban que, familiares y amigos que dependen del Hospital General, sí pueden conseguir la cita con el médico, o con otro si su doctor está de vacaciones, en tan solo 24 horas.
Lo cierto es que existe una división sanitaria en la ciudad en la que el agravio comparativo es constante. Las esperas son notablemente más altas en los centros del Vinalopó, mientras que los del General salen ganando. Por contra, los pacientes del Vinalopó pueden acudir por las tardes a ser atendidos, mientras que los del General deben acudir al PAS, aunque al menos este año ya tienen habilitado uno en Altabix y no tienen que desplazarse hasta El Toscar.
Un año más
El cabreo de los usuarios se acentúa aún más al recordar que no es la primera vez que se da esta situación en los puntos sanitarios que dependen del Vinalopó. Los pacientes ya denunciaron el pasado verano colas de hasta diez días, con El Toscar como mayor perjudicado.
Los usuarios no entienden «por qué hay que esperar tanto, cuando la sanidad debe ser inmediata y dar servicio las 24 horas. No es normal que si necesitamos una receta o tenemos una subida de garganta, el médico nos atienda 15 días después. Eso te obliga a ir a Urgencias», señala una usuaria ilicitana.
Quejas de enfermería
Por otra parte, y según ha podido saber este diario, el servicio de Enfermería acumula varias quejas de pacientes, por las formas en el trato recibido. Esta situación, además del malestar en el servicio, ha originado que desde Gerencia se pidan las explicaciones oportunas a las personas sobre las que recae la queja. Una actitud que no ha sentado muy bien a varios de los afectados.
Al parecer, el problema se remonta a varias semanas atrás, y las quejas se han producido desde entonces. Los trabajadores han recibido una advertencia por parte de los superiores alertando de la situación e instando a cambiar la actitud con los pacientes para erradicar el problema. Según fuentes consultadas, el problema estaría en el trato a nivel personal y no sanitario.
