La Basílica de Santa María retirará en los próximos días la leña acumulada en la azotea procedente del Belén de Navidad con el objetivo de evitar riesgos durante estas fiestas patronales. Desde el templo ilicitano han confirmado que sí que se va a proceder a la limpieza de las terrazas donde el material había sido acopiado y había quedado a la interperie.

La asociación cívica Ágora denunció hace unos días la situación y el peligro de incendio que corría el edificio religioso con la llegada de los actos festeros y el lanzamiento de los fuegos artificiales. El colectivo remitió un escrito al Ayuntamiento para solicitar la retirada de la leña también por el riesgo para las personas que transiten durante su alrededor. Tras trasladar la situación al Consistorio, Ágora también también puso en conocimiento de la Conselleria de Cultura el acopio de leña en el templo ilicitano.

La entidad recurrió a la Generalitat para pedir medidas preventivas ante el riesgo de incendio y la mala imagen que genera la leña acumulada. Al parecer, según siempre el colectivo, el material lleva acopiado en la azotea de la basílica al menos desde el mes de mayo.

Tal y como manifestaron ayer desde Ágora tras recibir contestación por parte del Ayuntamiento, y según han confirmado desde Santa María a este diario, la Basílica está viendo la forma de retirar la leña que hay acumulada que es la que se utiliza para hacer el belén de Navidad. Según los responsables del templo ilicitano, los trabajos de retirada quedarán terminados antes del día 13 de agosto.