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Violinistas de pretemporada en Elche

Cinco jóvenes músicos preparan el prestigioso Concurso de Llanes junto al ilicitano Manuel Ramos

Los cinco violinistas y su profesor en la casa de Manuel Ramos. MATÍAS SEGARRA

Al igual que los equipos de fútbol se encuentran concentrados estos días para preparar la temporada que dará comienzo en agosto, cinco jóvenes y prometedores violinistas ultiman esta semana en la partida de Jubalcoy los detalles para acudir el próximo mes al prestigioso Concurso de la Villa de Llanes. Ahí da cobijo el músico ilicitano Manuel Ramos a los cinco alumnos de la importante academia Katarina Gurska de Madrid y a su profesor, el ruso Savva Fatkulin. «Realmente el que se encarga de dar las clases es él. Yo me ocupo únicamente de la intendencia: de prepararles la comida y la cena y de que no les falte nada», bromea Ramos, director titular de la Orquesta Barroca Valenciana. Después se pone más serio para confesar que los chicos que acoge estos días de verano se encuentran «entre la élite de la élite de los músicos españoles de su edad».

En tierras ilicitanas los jóvenes madrileños han encontrado el lugar ideal para aislarse del mundo y concentrarse únicamente en mejorar con sus violines. «Estamos dando unas diez horas de clase al día, aunque siempre hay alguien tocando. Tampoco queremos convertir esto en un régimen militar porque también son una especie de vacaciones para ellos», afirma Fatkulin. Entre clase y clase, los adolescentes juegan en un entorno de naturaleza, totalmente opuesto al que tienen en el Madrid en el que residen, y combaten el calor con algún que otro chapuzón. «Mientras nos bañamos, a veces se producen conversaciones muy interesantes sobre la historia de la música. Es algo que no creo que ocurra en ninguna piscina del Mediterráneo», comenta Ramos.

El ilicitano quiere que los jóvenes que acoge estos días disfruten y aprendan algunos aspectos relevantes de la cultura y el ocio local. Por eso, les ha preparado una excursión a Elche, una jornada de playa o la visita a una jam session en una sala de Alicante. Los prometedores violinistas -Daniel Bello, Kaori López, Ángela Lorenzo, Jaime Maceira y Alberto Sanz- tienen edades comprendidas entre los 13 y los 22 años y disfrutan de su pasión por la música en un paraje natural, en el que de vez en cuando son sorprendidos por una araña, un escarabajo o una lagartija.

Los chavales ya tienen experiencia acumulada en certámenes como el que afrontarán a finales de agosto en la localidad asturiana. Jaime Maceira, por ejemplo, ha ganado los concursos para jóvenes intérpretes celebrados en Vigo y Cuenca. Hijo de pianista, toca el violín desde los cinco años y es ahí donde asegura que se encuentra «más cómodo», interpretando a Beethoven, Bach o Saint-Saëns.

Al margen de los violinistas y su profesor, la casa de Ramos recibe constantes visitas estos días. Son perfectas para tener público y una excusa más para que suene la música durante las particulares vacaciones de estos chicos.

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